El Lyon es invencible

El Olympique de Lyón se encuentra en un estado de forma memorable. No porque anoche confirmase su pase matemático a octavos de la Champions tras solventar con comodidad su duelo con el Dínamo de Kiev (1-0). Tampoco por las genialidades de Juninho Pernambucano, un artista en los saques de falta. Nada de eso. El cuadro que dirige Gérard Houllier es el único club que no ha perdido de las grandes ligas europeas. De momento acumula 14 triunfos consecutivos y un empate, por lo que no extraña el sentir de su técnico: "Estoy muy orgulloso de los últimos tres meses. Orgulloso de los resultados, orgulloso del juego y orgulloso de la actitud de los jugadores. La actitud es muy importante, y nosotros estamos mostrando una gran actitud", se regocijaba Houllier. Benzema, al cuarto de hora, abrió la lata ucrania, en lo que supuso la cuarta victoria seguida en Europa, precisamente en el grupo del Madrid, donde su portero, Coupet, sigue imbatido. El Lyon domina el torneo galo con 31 puntos, 11 de ventaja sobre su inmediato seguidor, el Marsella al que, por si había dudas, le dio un rapapolvo hace unas semanas (3-0).

Otro que casi está a punto de lograr el pase a octavos de final fue el Milan, que recibió al Anderlecht (4-1). Tras la derrota en el clásico del fin de semana con el Inter por 3-4 -salvando las distancias con el Lyon, el grupo de Mancini tampoco ha cedido un partido en el calcio, aunque su rumbo en Europa sea más borrascoso-, el técnico Carlo Ancelotti dio descanso a Pirlo y a Inzaghi. Kaká, con un hat trick, fue el mejor alumno de la clase. También brilló Cafú, aunque fue Gilardino el que cerró la cuenta.

No lo hizo el Celtic, que superaba la primera ronda si lograba los tres puntos. Los escoceses cayeron con estrépito en el Estadio Da Luz lisboeta, donde el Benfica mantiene sus opciones gracias a las dianas de Nuno Gomes y Karyaka. Caldwell, con un gol en propia puerta, abrió el marcador. El Oporto también ganó por las bravas en Hamburgo (1-3). El resultado no sorprende: hace dos semanas en Portugal, los dragones arrollaron por 4-1 a los alemanes, que siguen sin sumar siquiera un punto.

El Manchester United, que tenía el pase a punto de caramelo, rozó el ridículo por su fiasco en Copenhague (1-0). Allback, el delantero sueco que firmó el desastre de la selección española el mes pasado en la fase de clasificación para la Eurocopa de 2008, trastocó los planes de Alex Ferguson. Los diablos rojos notaron las ausencias de Ryan Giggs, Louis Saha y Gary Neville. Ferguson apostó demasiado fuerte desdibujando al equipo con seis jugadores distintos a los que superaron en la última jornada de la Premier al Bolton.

En el grupo G, el Arsenal pretendía enderezar el rumbo contra el CSKA de Moscú, el rival con el que se complicó la clasificación tras perder en Moscú. Henry y la pléyade de futbolistas de ataque de los gunners se vieron incapaces de batir el arco ruso. Cesc Fabregas malogró una oportunidad clarísima delante del portero, al igual que Henry, que falló a bocajarro un tiro sencillo. Van Persie se unió al despropósito ofensivo del conjunto de Arsène Wenger. Las tablas, sin goles, mantienen el suspense.