"Hay muchas cosas que cambiar"

Permanentemente cuestionado en la selección, que se enfrenta mañana a Suecia, David Albelda, de 29 años, no falta a una gran cita con España desde el Mundial de Corea y Japón de 2002. Su ascendiente en el Valencia, del que es capitán hace años, lo devuelven una y otra vez al combinado español, en el que cree que le llegó la hora de asumir el papel que corresponde a su experiencia, adornada por una medalla de plata en los Juegos de Sidney 2000 que compartió con Xavi (con quien formó una excelente pareja en el centro del campo) y Puyol.

Pregunta. ¿Se ha convertido en un marrón ser llamado por España?

Respuesta. No, cuando uno se hace futbolista a lo que aspira es a ir a la selección. Claro que tiene sus ventajas e inconvenientes. Otra cosa es el entorno, hay muchas cosas que cambiar, pero, deportivamente, muchos querrían estar en nuestro sitio.

"Yo no vi ningún complot en el Mundial y, si lo hubo, no debió afectar en nada deportivamente al equipo porque esos jugadores no jugaron"

"En la selección todo son debates continuos, que si Raúl sí o Raúl no, que si músculos o jugones, que si Torres sí o no. No es el mejor ambiente"

"Hay que asumir el rol de tu experiencia y veteranía. El liderazgo que muchas veces se marca desde la prensa no es el del vestuario"

P. ¿Qué hay que cambiar?

R. Cuando uno se clasifica para un Mundial o una Eurocopa, todos van de la mano, pero en las fases de clasificación todo son debates continuos: ahora, Raúl sí Raúl no; antes que si jugones o músculo; después, que si Torres sí o Torres no. No es el mejor ambiente para hacer un equipo competitivo de verdad.

P. En efecto, Luis se propuso un equipo competitivo y no lo ha conseguido.

R. Creo que sí se ha conseguido, en el nivel que se vio en el Mundial, pero tuvimos la mala suerte de caer en octavos contra Francia, una selección con mucha experiencia que, además, junto a Italia o Argentina ya sabe lo que es ganar.

P. ¿Entiende que Vicente haya preferido protegerse para su club en vez de acudir a la posible llamada de España?

R. Tengo entendido que está en un proceso de recuperación y que, de haber venido a la selección, no habría sido lo mejor para su tobillo. Es un problema físico que arrastra desde hace más de dos años.

P. ¿El histórico fracaso del combinado español pasa por la falta de grandes estrellas?

R. Es verdad que no tenemos jugadores desequilibrantes como Ronaldinho, pero sí hay grandes jugadores para cada puesto y lo que se debería hacer es jugar como un equipo, sabiendo sufrir en determinados momentos. No se trata sólo de tener el balón.

P. ¿Le dolió no jugar contra Francia en octavos del pasado Mundial?

R. Me dolió no contar demasiado cuando en los partidos de clasificación había sido titular en todos los partidos de Luis.

P. ¿Participó en un supuesto complot contra el seleccionador abanderado por los veteranos: Raúl, Cañizares, Michel Salgado y usted?

R. Yo no vi ningún complot, ninguna rebelión. Pero, de haberla habido, no debería haber afectado deportivamente porque esos jugadores apenas participaron. Yo esperé mi momento, como en la segunda parte ante Ucrania.

P. Pero de esos jugadores sólo queda usted.

R. No están porque esos jugadores, para pasarlos a suplentes con el estatus que tienen, hay que pensar el papel que van a desempeñar. No tiene nada que ver con la supuesta rebelión: Michel Salgado está lesionado, Cañizares queda fuera porque sólo se eligen dos porteros...

P. ¿De qué manera puede afectarles la ausencia de Raúl?

R. Esperemos que de ninguna. Todos tienen un ciclo, igual vuelve o igual no. Hay que pensar en el partido ante Suecia.

P. Por cierto, Luis cambió un sistema con el que venía jugando España durante años un mes antes del Mundial. ¿Le parece normal?

R. No lo sé, lo normal es tener un sistema asignado y unas variantes para los partidos que se atascan. Es verdad que siempre habíamos jugado un 4-4-2, pero se cambió antes del Mundial por el tipo de jugadores que había: muchos de toque, de estatura pequeña que marcaron el estilo. En el Mundial jugamos con tres medio centros en triángulo, de ellos dos media puntas, y tres puntas muy ofensivos. Es lo que nosotros interpretamos. Ahora creo que vamos a volver a un 4-4-2 parecido al del Valencia, pero sin los extremos tan abiertos.

P. Usted que ha trabajado con dos entrenadores científicos como Benítez y Quique, ¿los entrenamientos de Luis suponen retroceder algunos años?

R. No, son entrenadores de generaciones muy distintas. Aquellos usan vídeos para ver las cosas buenas y malas del propio equipo, mientras que aquí, en la selección, hay pocos días y nos fijamos más en el contrario.

P. Hay mucha improvisación.

R. Es que, a lo mejor, los movimientos que hago yo en mi club son diferentes a los de Puyol en el suyo. Hay que hacer equipo en pocos días y es complicado.

P. ¿Qué saben de Suecia?

R. Mucho, que es un equipo físicamente muy fuerte, que va bien por alto, que marca un ritmo alto de principio a fin... que es un conjunto típico del norte de Europa.

P. Lo mismo que Luis advirtió de Irlanda del Norte y acabaron perdiendo.

R. De 100 partidos ante Irlanda del Norte, ganamos 99. Fueron errores individuales, no del entrenador. Su juego aéreo nos hizo mucho daño y ante Suecia tendremos que contrarrestarlo.

P. ¿Cómo?

R. Presionando arriba para que no envíen los centros, avanzando la defensa...

P. Ahora que no está Raúl, los subcampeones olímpicos de Sidney, usted, Xavi y Puyol, deberían asumir el liderazgo.

R. Asumir el rol me gusta más, el rol que corresponde a nuestra experiencia y veteranía. También está Iker Casillas como veterano. El liderazgo que muchas veces se marca desde la prensa no se corresponde con el del vestuario.

P. Al menos ustedes saben lo que es un buen resultado con la selección.

R. Es muy diferente. En los Juegos, sin ninguna presión, conseguimos un bloque rocoso que sabía jugar al fútbol pero también sufrir como ante Italia en los cuartos de final. La Italia de Pirlo, Ambrosini y Abbiati. Después nos ganó en la final el Camerún de Eto'o porque hizo uso de jugadores mayores de 23 años: M'Boma o Geremi. En la absoluta, sin embargo, o ganas o eres un desastre, a pesar de no haber ganado nunca nada.

P. En Sidney formó una pareja muy productiva con Xavi.

R. He funcionado muy bien con Xavi en las categorías inferiores de la selección, pero en la absoluta no hemos tenido muchas oportunidades salvo en las fases de clasificación. En el Mundial de Corea éramos muy jóvenes; en la Eurocopa de Portugal, Iñaki Sáez prefirió a la pareja del Valencia , y en Alemania jugaron Xabi Alonso, Xavi y Cesc. Tampoco en Suecia creo que vayamos a jugar juntos: ha probado con otras parejas diferentes.

P. En el Valencia se le ve muy ágil mentalmente.

R. Sí, después de una buena pretemporada tengo los movimientos y los desmarques en la cabeza. Estoy disfrutando, como con el pase con el exterior del pie a Gavilán, en el cuarto gol al Nàstic: tienes que estar fresco mentalmente para meter ese pase entre una nube de contrarios. El buen funcionamiento de un equipo no depende tanto del medio centro como de los movimientos ofensivos del grupo, de los apoyos, que son mucho mejores en el Valencia ahora que el año pasado. Al final, uno tiene que saber defender y atacar para estar tantos años en Primera, es una combinación de todo.