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La UGT condecora a un sindicalista condenado por maltratar a un preso

Diversas entidades piden a Justicia que se desmarque del acto

El sindicato de prisiones FSP-UGT ha organizado unas jornadas para la próxima semana que finalizarán con la condecoración "en reconocimiento a su trayectoria" a Manuel Allué Pastor, un líder de esa organización que ha estado inmerso en diversos procesos judiciales acusado de maltratar y torturar a presos y que está condenado en sentencia firme a un mes de suspensión de empleo y sueldo por "rigor innecesario" con un recluso.

Las Primeras Jornadas Penitenciarias de la FSP-UGT se celebrarán del 3 al 5 de octubre y al acto de clausura asistirán, entre otros, el secretario general de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, Albert Batlle. Ese organismo, dependiente del Departamento de Justicia que dirige Josep Maria Vallès, aparece como colaborador en el programa oficial y concede un certificado de asistencia a los funcionarios de prisiones para facilitar su promoción profesional.

Manuel Allué ha estado inmerso en los últimos años en diversos procesos judiciales por episodios de supuestos malos tratos a presos, aunque en casi todos fue absuelto o exculpado. Tiene una condena firme de un mes de empleo y sueldo por golpear a un preso de manera "desproporcionada", en compañía de un grupo de funcionarios. La sentencia fue dictada el 1 de junio de 2000 por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña después de que Allué recurriese la sanción de dos meses de empleo y sueldo y pérdida de puesto de trabajo por falta grave que le impuso el entonces director de prisiones, Ignasi García Clavel.

Los hechos de la condena ocurrieron el 19 de agosto de 1992, cuando Allué y otros funcionarios entraron con sus porras en la celda de un preso de Quatre Camins sin que nada lo justificase. De lo ocurrido allí nada se dice en la sentencia, aunque se recuerda que "la utilización de medios coercitivos para dirigirse a un interno" por parte de los funcionarios fue "totalmente desproporcionada". También añaden que Allué "no podía, bajo ninguna circunstancia, emplear tales medios, salvo situaciones excepcionales tipificadas o conocidas" que no se dieron.

"Consciente de la ilegalidad"

El tribunal añade que Allué vulneró la norma y que "era consciente de la ilegalidad de la acción que pretendía llevar a cabo" y que finalmente concretó, junto con otros funcionarios.

UGT es actualmente el sindicato mayoritario en Cataluña en el ámbito penitenciario, después del desembarco mayoritario que se produjo en 2003 de centenares de militantes de Catac, organización de la que fueron expulsados con Allué al frente, que era el coordinador general de la sección de prisiones.

La Coordinadora Catalana para la prevención de la Tortura reclamó ayer a la UGT que retire del programa de sus jornadas la entrega de la distinción a Allué y que el Departamento de Justicia se desmarque explícitamente del reconocimiento. La citada coordinadora está integrada por 12 entidades, de entre las que destaca el Instituto de Derechos Humanos de Cataluña y el Observatorio del Sistema Penal de la Universidad de Barcelona.

"Si alguien tiene alguna cosa que decir, que lo diga la UGT", explicó ayer Batlle, quien acusó a la coordinadora de actuar con "insidia" y de "disparar siempre contra el pianista". Batlle recordó que a las jornadas penitenciarias de la UGT también está previsto que asista el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, el consejero Vallès, y representantes de todos los grupos parlamentarios, además de jueces y fiscales. La UGT de Cataluña, por su parte, rechazó realizar cualquier comentario sobre la condecoración a Allué.

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