La huelga de médicos retrasó la reducción de las listas de espera en el primer semestre

El número de pacientes en lista de espera apenas se redujo el 1,14% en el primer semestre del año, de acuerdo con los datos que ayer difundió la consejera de Salud, Marina Geli. Esta cifra contrasta con el importante descenso del 12% registrado en los últimos seis meses de 2005. El motivo de este retraso es la huelga de médicos en primavera, que paralizó la sanidad catalana durante siete días. Geli destacó el "aumento de actividad" pese a los paros y constató que en junio 58.028 personas esperaban una media de 4,3 meses para ser operadas.

A tenor del balance que expuso Geli en conferencia de prensa, en junio había 58.028 personas esperando una intervención quirúrgica. La media de tiempo desde que el médico realiza el diagnóstico hasta que el paciente se somete a la operación era de 4,33 meses. Si se compara con los 66.619 pacientes que en junio de 2005 esperaban casi cinco meses para ser operados, la reducción es significativa: 8.591 personas menos; es decir, casi el 13%. Pero si se toma como referencia diciembre de 2005, el número de pacientes en lista de espera apenas ha disminuido en 672 personas.

La consejera prefirió ver el vaso medio lleno y expresó su satisfacción por los resultados: "Durante la semana de paros tuvimos que desprogramar mucha actividad, pero aun así hemos mejorado". Los datos que difundió en su día el Instituto Catalán de la Salud indican que las siete jornadas de huelga en la sanidad pública y concertada obligaron a cancelar 2.100 operaciones.

Ocho millones adicionales

Geli aseguró que la "práctica totalidad" de visitas e intervenciones ya se ha reprogramado, aunque admitió que algunas tendrán que esperar y los retrasos se acumularán "hasta octubre". Recuperar el tiempo perdido no ha salido gratis. El departamento ha tenido que destinar ocho millones de euros adicionales -es decir, al margen del presupuesto ordinario- para aumentar el número de pruebas diagnósticas y de intervenciones quirúrgicas en los hospitales catalanes. La consejera no concretó si se tendrán que poner sobre la mesa más recursos para neutralizar los efectos de la huelga: "Es algo que aún no sabemos".

"Tras la huelga, tomamos el compromiso de que recuperaríamos la actividad", dijo Geli. Los datos de Salud reflejan que en el primer semestre de 2006 se registraron 80.396 actuaciones; 239 más que en el mismo periodo del año anterior.

Quienes esperan una operación de cataratas (más de 15.600 personas) o de hernias están de enhorabuena: estas intervenciones son las que han registrado un descenso más pronunciado en las listas de espera. Por el contrario, los que esperan una amigdalectomía, una circuncisión o una operación de quistes deberán tener paciencia porque hay más cola. La suerte también es desigual en el territorio. Así, en las regiones sanitarias del Camp de Tarragona y de Lleida, el tiempo de resolución ha disminuido. Todo lo contrario que en las comarcas del Ebro (17,78%) o en la Cataluña central.

Aparte de ofrecer unos resultados que calificó de "positivos", la consejera socialista avanzó algunas medidas que su departamento prevé aplicar en los próximos años. Eso, a pesar de que el próximo 1 de noviembre se celebrarán elecciones al Parlamento catalán. "Los ciudadanos se quejan sobre todo de los retrasos: en las listas de espera, en las pruebas diagnósticas o en la visita con un especialista", admitió.

Geli se comprometió a aprobar, en diciembre, un decreto que garantizará un tiempo de espera máximo de tres meses para realizar la mayoría de pruebas diagnósticas. Por ejemplo, una mamografía, una resonancia magnética o una colonoscopia. Pero habrá excepciones. En las pruebas de seguimiento, urgencias o sospecha de cáncer, los diagnósticos se resolverán en un máximo de 30 días. El único diagnóstico que podrá sobrepasar el umbral de los tres meses, de acuerdo con el compromiso de Salud, serán los polisomnogramas (estudios del sueño), con un tiempo de espera tope de 120 días.

La consejera también prometió que la totalidad de las listas de espera estarán "monitorizadas" en un plazo de cuatro años. A través de este sistema se tiene conocimiento del estado del 96% de las listas.

Sobre el refuerzo del servicio en algunos centros sanitarios durante el verano, Geli destacó su "buen funcionamiento", aunque admitió "dificultades" a la hora de contratar a personal. La consejera también señaló que el número de tarjetas sanitarias en Cataluña ha aumentado hasta 7.196.168. Esta cifra supone casi 91.000 tarjetas más que en junio del año pasado.