Esmeralda Grao, Frank Lacy y Muchachito animan las noches

No importa que sea mitad de semana y del mes de agosto, porque Madrid, puede ofrecer una noche interesante con conciertos que estimulan las ganas de seguir acudiendo a ellos. El club Clamores inicia hoy una tanda de tres días con el trombonista Frank Lacy, mientras que en su sala hermana, Galileo Galilei, canta la voz de seda de Esmeralda Grao. Para más inri, Leganés cuenta esta noche con el desenfreno de Muchachito Bombo Infierno, un acicate eficaz para celebrar unas fiestas patronales.

Desde Orihuela, Esmeralda Grao vino a Madrid hace una docena de años. La ciudad vivía entonces la efervescencia de los Nuevos Cantautores, con Pedro Guerra o Javier Álvarez despuntando en el Retiro o bares como Libertad 8. La alicantina fue, junto a Inma Serrano y Rosana, de las primeras que aportaron al movimiento el punto femenino. Su voz, dulce al tiempo que apasionada, sirvió a Nacho Cano para presentarse en solitario al disolverse Mecano. Además, en el musical que luego éste dirigió, Hoy no me puedo levantar, la voz de la Grao tenía una presencia destacada. Sólo con una guitarra y su garganta, Esmeralda Grao puede poner un auditorio patas arriba. En sus composiciones, mezcla los sonidos mediterráneos, de ecos árabes, copleros y aflamencados, con letras de acercamiento a la realidad y a las injusticias del mundo. Este año ha estado en la plaza del Zócalo de la capital mexicana para protestar contra los asesinatos masivos de mujeres en Ciudad Juárez, pues hace tiempo que manifestó públicamente su compromiso contra la violencia de género, y su lucha para denunciar el machismo, como consta en muchas de sus canciones.

Trombón de varas

Por su parte, Frank Lacy se muestra como un trombonista muy versátil capaz de acercarse al bebop, sin desdeñar el blues, el funk, el swing e, incluso, el afro beat, que es como se denomina el arte de aunar los ritmos étnicos de África, con los occidentales más modernos. Además del trombón de varas, Lacy puede atreverse con cualquier instrumento adecuado al jazz. Lacy inicia hoy una tanda de cuatro noches en las que estará acompañado por el pianista Germán Kucich, el contrabajista Miguel Ángel Chastang, y el baterista Juanma Barroso.

Lo de Muchachito Bombo Infierno es una fiesta. Leganés vive las suyas en honor a la Virgen de Butarque y su propuesta es más que adecuada. El gracejo de la rumba callejera, llevada a la excitación por la guitarra trepidante de Jairo Perea, nombre que se oculta tras Muchachito, y por sus golpes simultáneos de su incendiario bombo, han constituido este último año toda una revelación.

Esmeralda Grao. Galileo Gailei. Galileo, 100, 21.30, 6 euros. Frank Lacy Quartet, hasta el 19 en Clamores, Alburquerque, 14, 22.00, 10 euros. Muchachito Bombo Infierno en teatro Egaleo (Leganés), hoy a las 23.00. 4 euros.