Última regata de la familia real

La infanta Leonor y los hijos de los duques de Lugo siguieron acaparando todas las miradas durante las vacaciones de la familia real en Palma de Mallorca. Ayer, los fotógrafos se agolparon en la proa de las embarcaciones, en busca del retrato perfecto, mientras la familia real disfrutaba de la última jornada de regatas de la XXV Copa del Rey de Vela. Doña Sofía, a bordo del yate Fortuna, estuvo en todo momento pendiente de sus nietos, especialmente de Leonor, que lo pasó de lo lindo jugando con las gafas de sol de su abuela, mientras sus primos Froilán y Victoria Federica correteaban por la cubierta. La infanta Leonor, que ha cumplido nueve meses durante estas vacaciones, vistió de blanco y captó la atracción de los fotógrafos cuando salió a la cubierta del yate real en brazos de doña Sofía.

La princesa Letizia tuvo que dividir su atención entre su hija y su marido, el príncipe Felipe, que participó en la competición a bordo del yate CAM, que encabezó la clasificación hasta el sábado pasado, cuando fue superado por el Movistar. Por su parte, la infanta Elena se embarcó ayer en el Siemens y don Juan Carlos, como es habitual, en el Bribón.

Don Felipe interrumpe hoy su estancia en Mallorca para desplazarse a Colombia, en donde representará a España en la toma de posesión del reelecto presidente Álvaro Uribe. Es la segunda vez este verano que el heredero de la Corona interrumpe sus vacaciones, pues a principios de esta semana se desplazó a la capital peruana para la investidura del recientemente elegido Alan García.

Por la noche, los Reyes, acompañados por otros miembros de la familia real, presidieron la entrega de trofeos de esta copa de vela, que se llevó a cabo en el castillo de Bellver.