Las lágrimas de De la Fuente, 'el Virenque' español
David de la Fuente, cántabro de Matamorosa, parecía Virenque en sus mejores tiempos, lanzado a una escapada interminable. Abandonó el pelotón en el kilómetro 31 junto a Flecha, Camaño y Wegmann, y prolongó su aventura más de 160 kilómetros, los últimos en solitario, solo contra la carretera. Al más puro estilo Virenque.
Su hermano pequeño, Raúl, ciclista aficionado, corrió a su lado con una bandera de Cantabria. "Se me caían las lágrimas de la emoción", dijo tras la etapa De la Fuente, líder gracias a su pundonor de la clasificación de la montaña y ganador por segunda vez en el Tour del premio de la combatividad. Ya lo había conseguido en la segunda etapa, en Luxemburgo, protagonista también de una eterna escapada.
En la meta, con el maillot de lunares, De la Fuente estaba en las nubes. No en vano pasará a la historia de la carrera como el corredor que coronó primero el Tourmalet en 2006. "No tengo palabras, esto me parece irreal. Salgo de un sueño y me meto en otro. Lo que estoy haciendo era inalcanzable para mí, no me lo imaginaba nunca", dijo el corredor del Saunier Duval.
Y eso que De la Fuente llegó a la cima casi llorando entre la emoción de ver a su hermano y el cansancio. Wegmann le acompañó durante casi toda la etapa, pero el español dejó atrás al alemán en la subida al Portillon. "Quería sprintar para coger los puntos de la montaña y me fui", explicó.
Su intención no era marcharse en solitario, pero una vez lanzado no pudo parar. Sin ayuda de nadie y con el viento zarandeándole, acabó engullido por el pelotón. "Ha sido una etapa durísima. Pasar primero el Tourmalet, un puerto tan mítico, ha sido la leche, no soy consciente todavía ni lo seré hasta dentro de un tiempo", añadió.
A la espera de los Alpes, el cántabro De la Fuente espera conservar hoy su maillot de rey de la montaña en la etapa entre Luchon y Carcassonne, con tres puertos de cuarta categoría y uno de segunda. "Tengo que defenderlo un día más, al menos un día", pedía, casi se suplicaba a sí mismo tras cruzar la línea de meta en Pla de Beret.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.