"Es el Raúl de siempre y marca diferencias"

La pegó como pudo y lo gritó con el alma. Raúl, el cuestionado Raúl, dio el empate a España y se cobró venganza. Buscó la esquina del campo y allí se dejó abrazar por la gente que luchaba con él. Entonces, mientras le estrujaban los niños que ahora mandan con la pelota en los pies vestidos con la roja, se acordó de ellos, de los suyos, del núcleo duro de su familia, y les buscó en el banquillo, allí donde les ha confinado Luis Aragonés. Cuando corría al banco se encontró con Míchel Salgado. Luego, llegó hasta el banco y chocó las manos con Cañizares, Al resto, ni agua. Al míster, tampoco. Y todo debe interpretarse de manera muy normal, a tenor de las declaraciones de los jugadores. Lo cierto es que pareció un rincón de la fiesta, reservado sólo para invitados. Y ahí sólo cabían Raúl, Salgado y Cañizares, que se fue de la zona mixta fulminando con la mirada a cuantos trataron de hablar con él.

"No me ha dedicado el gol a mí, sino a alguno que está por ahí y tiene poca idea", dice Salgado

"Nos fiamos siempre de él. Es un futbolista al que no le puede la presión", cuenta Pablo

Sí habló Míchel. "Salió así. Fue un momento bonito para él y corrí a abrazarle. Nos encontramos por el camino y nos abrazamos", explicó el lateral gallego. "No, no me lo ha dedicado a mí. Igual, a alguno que está por ahí y tiene poca idea", dijo señalando a la zona donde trabajaban compañeros de radio. Y se arrancó en inglés: "Fue un gol importante para el equipo y también para él. Es el Raul de siempre, el que nos tiene acostumbrados a marcar diferencias. Pero hay gente de poca idea que habla mucho".

Fajándose por el compañero, Salgado no rehuyó entrar en una extraña batalla que parece haber nacido en las entrañas mismas del plante de Luis Aragonés, que se enganchó primero con Cañizares, luego pareció en desacuerdos con Raul, acabó sacando una nota y, al final, se mata al mensajero. Muy de la selección. Está pasando en Francia; pasó antes en Italia, en Estados Unidos, y hasta en Corea del Sur.

"Lo importante es el grupo, no el gol", aseguró el protagonista de la jugada del tanto del empate. El capitán de la selección, que ha pasado por momentos duros, insitió tras el partido en que lo importante "es seguir trabajando, paso a paso". "Es un grande y soporta la presión, no lo dude", aseguró Xavi al hablar de Raúl; "es suplente y eso sorprende. Se escribe y se habla mucho. Pero lleva mucho en esto. Las ha visto de todos los colores y está muy tranquilo".

Casillas, que recibió su primer gol del torneo, aseguró que al equipo le vino bien sufrir un poco: "Fuimos a remolque desde el minuto 8 y eso servirá de lección. Nos vino bien sufrir. Así veremos que esto es un Mundial y ningún rival es fácil". Lo mejor para él es que "el equipo es joven, pero nunca pierde la calma": "Seguimos haciendo nuestro juego, tuvimos paciencia y sabíamos que el gol llegaría".

Pablo, el defensa del Atlético, reconoció que el partido había sido "muy duro". "En el vestuario sabemos que muchos de los encuentros en el Mundial serán como éste", señaló al término del encuentro, cuando elogió a Raúl, autor de un gol que le iguala con Butragueño, Hierro y Morientes como máximo goleador de España en la historia de los Mundiales. "Nos fiamos siempre de él. Es un futbolista al que no le puede la presión y se merece este gol. Será uno de los muchos que le quedan por marcar", apuntó. Además, Luis García indicó que el triunfo del combinado nacional era "una bonita recompensa tras superar un resultado adverso". "Con esto ha crecido la confianza del grupo porque remontar este partido nos ha costado mucha tensión y esfuerzo", añadió.