"Ronaldinho no merecía el castigo"

Frank Rijkaard suele ser moderado en sus juicios sobre los árbitros porque siempre sostiene que hay que ser respetuoso y porque sirve de bien poco hablar de ellos. Pero ayer no se calló. El entrenador del Barça, al igual que todo su vestuario y la misma junta, considera que los comités han sido excesivamente severos con Ronaldinho, que hoy cumplirá la sanción por la entrada sobre Cani ante el Zaragoza. "Es una lástima porque no se lo merecía", dijo de entrada el técnico. "Ronnie transmite alegría, deportividad y compañerismo en el campo. No me parece correcto que se pierda un partido por una falta como la que hizo".

El Barça tenía relativas esperanzas de obtener el viernes por la tarde la suspensión cautelar de la sanción -de hecho, el club había invitado esa mañana a los jugadores a no hacer declaraciones sobre Ronaldinho para no entorpecer el recurso- pero el Comité Superior de Disciplina Deportiva ratificó la decisión de Apelación y Competición. Por primera vez en cinco meses, el Barça jugará sin Ronaldinho y sin Deco y Messi, ambos lesionados. La última vez que faltó este trío de jugadores fue el 19 de septiembre en el campo del Betis: el argentino aún carecía de permiso federativo y Rijkaard quiso dar un aviso al brasileño y al portugués. El toque funcionó: el Barça ganó por un contundente 1-4.

"Pues yo ya me esperaba que no le quitaran la tarjeta a Ronaldinho. Es difícil porque los comités suelen dar la razón a los árbitros", dijo Belletti, ya recuperado de su lesión y que se mostró muy optimista respecto al partido de Mestalla. "Seguro que podemos ganar sin ellos. Fuera de casa, ya lo hemos hecho sin su concurso", subrayó Belletti en alusión a ese partido y otros dos más: ante el Udinese, en la Champions (0-2) y en Zamora, en la Copa (1-3). "El partido de Valencia es muy importante y esas bajas son una motivación añadida", abundó Rijkaard.

La trampa de las dudas

Pese a tener cojos el centro del campo y la delantera, el holandés, parco en palabras, lanzó un mensaje de moderado optimismo ante un rival al que elogió y al que ha vencido a domicilio las dos últimas temporadas (0-1 y 0-2). "¿Si entrarán las dudas si perdemos y se ponen a seis puntos?", se preguntó. "No creo. Sólo en lo que ha pasado y está pasando. Cuando íamos ganando, yo decía que quedaban muchísimos partidos. La Liga no se decide en diciembre o enero sino entre abril y mayo. Tenemos una ventaja importante de puntos y no hay que caer en la trampa de las dudas. La plantilla es fuerte y tiene una mentalidad correcta".