Mendizorroza clama contra Piterman

A medida que caían los goles de un Mallorca fino y astuto, crecía el clamor de Mendizorroza contra Dmitry Piterman. Cuando Víctor conseguía el segundo, algunos aficionados (de los pocos que fueron al estadio) se acercaron al banquillo alavesista e increparon al presidente-entrenador. Con el tercer gol, de Iuliano, el público (que lo aplaudió), cargó de nuevo con cánticos contra el actual dueño del equipo alavesista. Algo tiene que ver en el asunto que el Alavés aún no haya ganado ni un solo partido en su campo de los siete disputados, que exhiba una falta de imaginación y pegada alarmantes, sólo resueltas a veces en los desplazamientos, o que los fichajes del empresario ucraniano parezca que le hayan tocado en un sorteo con mala suerte.

El Mallorca le desarmó de un plumazo. No por muchos delanteros se ataca mejor y el tándem Piterman-Cos puso en liza todo lo que tenía. Daba igual que Bodipo fuera un espejismo de futbolista allí en la banda derecha o que Aloisi más fuera el fantasma del delantero instigador que siempre fue. Si no hay surtidor, no hay agua.

El Mallorca de Cúper, con menos delanteros pero bien agrupado, fue moviendo el árbol hasta que cayeron los frutos. El medio campo mallorquinista siempre fue superior en número y calidad a su oponente y desde allí encontraba con facilidad a Arango, que mientras hizo falta dio un recital de astucia y calidad. Antes de dar el pase del primer gol, probó dos veces a Constanzo y el meta argentino respondió con acierto. Arango era la inteligencia necesaria a lapresencia enorme de Farinós y Pereyra.

El Alavés no tenía argumentos para frenar a un equipo que empezaba a practicar el rodillo y a controlar el juego sin prisa, pero sin pausa. El gol de Víctor, en la prolongación del primer período le dió la solidez que necesitaba para creer en su fe. El segundo, obtenido a pooco de iniciarse la segunda, tumbó definitivamente a un Alavés que se había limitado a tirar fuera una vez en el primer tiempo y a encontrar su primera oportunidad clara en el minuto 64 de partido, con 0-2 en el marcador por medio de Aloisi. A renglón seguido Iuliano, un ilustre de la Juve, se estrenaba como goleador en España con ua volea preciosa. Ya no hubo más que gritos en Mendizorroza y una mano prodigiosa de Prats a remate de Nené.