Valderas transmite a Llamazares por carta su "profundo malestar" con la dirección federal

El coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, ha decidido trasladar por carta al máximo dirigente federal, Gaspar Llamazares, el "profundo malestar" de la organización autonómica con decisiones de la dirección "confusas y carentes de perfil propio", y avisarle de que "nos encontrarás en contra" de los planteamientos confederales. En el escrito, Valderas le recuerda a Llamazares que su actitud repercute en el estado de opinión, y que en las encuestas IU de Andalucía no llega al 5% necesario para recuperar los diputados en el Congreso que perdió en los últimos comicios.

La gota que ha colmado el vaso de la contención de IU de Andalucía respecto a las decisiones que ha ido tomando la dirección federal fue el anuncio, el pasado día 17, de que no presentarían enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2006. La organización andaluza había decidido por unanimidad en el Consejo Andaluz, (máximo órgano entre asambleas), 15 días antes, su voto negativo a las cuentas socialistas, ya que las inversiones para la comunidad están por debajo de lo que supone la población (18%) y no se reconoce la deuda histórica.

El presidente de la comisión de IU que estaba negociando con el PSOE los presupuestos, Felipe Alcaraz, dimitió de su cargo. Según explicó ayer en conferencia de prensa, el acuerdo de la dirección era que no habría pronunciamiento sobre la enmienda a la totalidad hasta que no concluyeran las negociaciones, el día 20. "No sabemos que es lo que se ha acordado, únicamente que el presidente Zapatero será flexible con las enmiendas parciales, ¡Pues con eso y un bizcocho, hasta mañana a las ocho!", dijo irónicamente Felipe Alcaraz.

Aunque Valderas explicó que la carta enviada a Llamazares no pretende confrontar con la dirección federal y es una reflexión "constructiva y positiva", lo cierto es que el escrito dice claramente que la organización andaluza tiene un "profundo malestar" respecto a las posiciones políticas del coordinador federal en torno a los PGE, el apoyo a la Ley de Defensa, y la propuesta del Estatuto de Cataluña. También se dice de forma explícita que la imagen que proyecta IU federal afecta "a todos", y que en las encuestas conocidas IU de Andalucía no llega al 5% necesario para volver a recuperar la presencia en el Congreso de los Diputados (tres escaños en 2000). Esta reflexión se escucha también en otros sectores de IU, que ven con preocupación el rechazo que despierta entre los votantes andaluces el apoyo de Llamazares al modelo de financiación que recoge la propuesta del Estatuto catalán. "Si a esto le sumamos el asentimiento a la Ley de Defensa, que mantiene las bases norteamericanas en Andalucía, es muy difícil que volvamos a tener escaños en el Parlamento nacional", señaló ayer un dirigente.

Otros miembros de IU alertan de que, si bien lo previsible es que el Estatuto catalán salga del Congreso de los Diputados sin el apartado de financiación por ser este inconstitucional, Llamazares ya ha dicho en los foros internos que "ese es el modelo de toda IU, un sistema insolidario y confederal que no puede ser aceptado por ninguna de las federaciones de IU".

En la conferencia de prensa de ayer Diego Valderas no avanzó que hará IU de Andalucía en el caso de que el coordinador federal siga sin tener en cuenta sus decisiones. Únicamente expresó su propósito de defender públicamente las posturas que acuerde la organización andaluza. De momento, la propuesta de la portavoz parlamentaria, Concha Caballero, de que IU de Andalucía alcance más soberanía es sólo una opinión personal.