El Gobierno pretende introducir en el Estatut cambios que regulen la relación con el Estado

El Gobierno pretende introducir en el Estatut cambios que regulen la relación de la Generalitat con el Estado y los ayuntamientos. Tras la admisión a trámite de la reforma, el pasado martes en el Congreso de los Diputados, populares y socialistas han acordado limitar al máximo las enmiendas durante el debate en la comisión Constitucional, que previsiblemente no se iniciará hasta el próximo mes de noviembre. La voluntad de hacer prevalecer el consenso obtenido por los dos partidos minoritarios impedirá rebajar o suprimir del Estatut el techo electoral del 5%.

Castellano y Pla hicieron una defensa que tuvo en cuenta sus posiciones partidistas

El amplio apoyo obtenido en el Congreso durante la admisión a trámite del Estatut impidió el pasado martes que fuese visible la satisfacción en el entorno del jefe del Consell, Francisco Camps, por el discurso del portavoz parlamentario Serafín Castellano. Un discurso que ocultaba una segunda lectura destinada a desmontar los argumentos contrarios a la reforma del Estatut esgrimidos por los zaplanistas, con el presidente de las Cortes Valencianas, Julio de España, a la cabeza.

En su intervención en el Congreso, Serafín Castellano desgranó un rosario de argumentos destinados a demostrar que la reforma no amenaza la unidad de España, ni cuestiona el concepto de nación. El portavoz popular también arremetió contra las críticas zaplanistas que consideran que el Estatut margina la situación predominante del castellano y quiso dejar bien claro que los artículos referidos al Tribunal Superior de Justicia y al Servicio Tributario Valenciano respetan la posición del PP nacional y no modifican la estructura actual.

La frialdad de las relaciones entre Camps y el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, fue ostensible durante el debate de toma en consideración de la reforma. Zaplana apenas llegó a realizar algún tímido gesto de apoyo, no ya a la reforma, sino a la intervención de los propios portavoces del PP. Fuentes del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados indicaron que será Miguel Ángel Cortés el encargado de hablar con el portavoz socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, para establecer el mecanismo de presentación de enmiendas en la comisión Constitucional.

Una comisión en la que también estarán presentes, negociando el contenido de las enmiendas, los populares Federico Trillo y la secretaria de Política Autonómica del PP, Soraya Sáenz de Santamaría. Rubalcaba contará con la asistencia de Ciprià Ciscar, que formó parte de la comisión de estudio para la reforma del Estatut del PSPV. Ayer fuentes del socialismo valenciano se mostraron satisfechas por la defensa realizada por Joan Ignasi Pla del autonomismo cooperativo en el pleno del Congreso. El discurso, según fuentes del partido, estuvo engarzado a la perfección con las intervenciones de Rubalcaba y de la propia vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.

En este sentido, el Gobierno quiere que el debate del Estatut en la comisión Constitucional sirva para ajustar el marco de relaciones de la Generalitat con los otros niveles de la Administración (el Estado y los ayuntamientos).

El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero también pretende mejorar la redacción de la disposición transitoria tercera de la reforma del Estatut, referida a la recuperación del derecho foral valenciano. Según el Gobierno, este argumento debe ajustarse de manera que no se convierta, aunque sea involuntariamente, en una puerta que permita blindar competencias autonómicas basándose en los derechos históricos e introducir a la Comunidad Valenciana entre las comunidades forales.

El amplio respaldo del Congreso en la admisión a trámite del Estatut será pues, a partir de ahora, un elemento que intentarán capitalizar políticamente los partidos mayoritarios reacios a aceptar enmiendas de grupos minoritarios.