Todos los colores de Morella

Morella se vistió ayer de todos los colores con ocasión de la fiesta grande de L'Anunci del 52 Sexenio, una cita que se celebra cada seis años y que transforma a la ciudad de Els Ports. Es imposible escapar de la batalla entusiasta y colorista donde se disparan hasta cien toneladas de confeti. Los papelitos de colores inundaron por la tarde las calles de la ciudad medieval en una lluvia torrencial protagonizada por los morellanos en el desfile de carrozas y también desde las calles y los numerosos balcones de las casas. Lo cierto es que una fiesta sexenal marca el ciclo vital de una población que parecer contar el tiempo de seis en seis años.

Los tres mil vecinos de Morella se multiplicaron para ofrecer albergue a unos 25.000 participantes en la batalla. Más de dos mil personas participaron en el desfile de las 42 carrozas realizadas en su mayoría con tapices de papel de seda rizado, artesanía popular típica del municipio castellonense. La creatividad y el minucioso arte del tapizado componen uno de los mayores atractivos de esta fiesta, aunque la colorista explosión de los confeti es el referente de L'Anunci de Morella. Desde hace varios meses, los cerca de 3.000 habitantes de Morella vienen trabajando en la confección de estos monumentos del arte popular sin escatimar en creatividad y originalidad a la hora de plasmar temas. Abordan desde el cónclave del Vaticano, el barco de los playmobil, los dinosaurios, los cuentos o los dibujos animados infantiles, hasta la entrega de los Oscar, el universo de Gaudí o Dalí, ángeles y demonios, las Olimpiadas, Don Quijote, el turismo, la Copa del América o las escuderías de Ferrari y Renault.

El solemne Pregón de L'Anunci, previo a la batalla, corrió a cargo de una joven estudiante morellana, Helena Pallarés Segura, que desfiló a caballo, acompañada de un cortejo con caballerías y los primeros símbolos de la ciudad, la histórica senyera de Morella que porta el síndic municipal, la gran ave L'Aliga, o la carroza del Ayuntamiento, que representa los atributos reales de la ciudad: Fiel, Fuerte y Prudente.