La juez de Roquetas ve indicios de delito en la actuación del teniente y un guardia

La juez de Roquetas, Estefanía López, decretó ayer la libertad para los nueve guardias civiles imputados por la muerte de Juan Martínez Galdeano, tras la declaración del teniente del cuartel y otros dos agentes. Según el auto, "en el momento actual no puede afirmarse contundentemente la relación causal entre la actuación de los imputados y el fallecimiento". La juez desoyó así la petición de la fiscalía, que había pedido cárcel para el teniente y otro agente. El auto añade sobre ellos: "Del material gráfico y de las declaraciones parece inferirse una extralimitación en sus funciones y una actividad presuntamente delictiva".

La juez también rechazó el argumento de alarma social, esgrimido por el abogado de la familia del fallecido para reclamar prisión para los imputados, por considerar que no es tanta como para fundamentar una medida cautelar de tal envergadura "ni nublar la perspectiva de la actuación judicial".

El auto también precisa la inexistencia de riesgo de fuga de los acusados y la imposibilidad de que se produzca "una reiteración delictiva" o de que puedan alterar o destruir pruebas, ya que están suspendidos de sus funciones.

Tras conocer el auto que dejaba en libertad a todos los imputados, la defensa de los nueve guardias civiles pidió la dimisión del ministro del Interior, José Antonio Alonso, por "alentar y echar leña al fuego por una información que hoy se demuestra que era incierta". "Se ha dejado actuar a la justicia con la tranquilidad y serenidad que venimos reivindicando desde el principio", manifestó el abogado Gustavo Arduán.

La acusación, por su parte, anunció su intención de recurrir el auto de libertad. José Ramón Cantalejo, el abogado de la familia del fallecido, cree que la juez puede cambiar de parecer cuando se conozcan los resultados definitivos de la autopsia y la causa de la rotura del esternón del fallecido.

Mientras el teniente y otros dos agentes prestaban declaración, en la puerta de los juzgados decenas de vecinos de la población almeriense reclamaban "justicia" por la muerte de Juan Martínez Galdeano cuando era reducido por un grupo de guardias en la puerta del cuartel el pasado 24 de julio.