Los desencuentros de Paquillo y Odriozola

El Consejo Superior de Deportes (CSD) no descarta la contratación de técnicos extranjeros para aquellas disciplinas en las que se haya detectado un retraso acusado. Así lo prevé el plan ADO del ciclo olímpico Pekín 2008, más flexible que los anteriores, y así lo adelantan fuentes del propio CSD, que añaden que una posible solución al problema de la natación española, de tan pésima imagen en los recientes Mundiales de Montreal, podría empezar con la contratación de algún técnico australiano.

Jaime Lissavetzky, el presidente del CSD, lleva meses hablando con Paquillo Fernández del conflicto que le enfrenta con la federación española a cuenta de su técnico polaco, Robert Korzeniowski, por lo que el granadino, que se le quejaba de que no le hacían caso, le ha oído alguna vez una frase rotunda. "No tengo nada en contra de que vengan técnicos extranjeros a España", dijo Lissavetzky en una ocasión. Y a esa frase se agarra Paquillo, para quien la base del conflicto es la no consideración legal de Korzeniowski como técnico por ser extranjero. Si la federación diera trato oficial de técnico a Korzeniowski, Paquillo no tendría que presentar justificantes de los gastos de su preparación. Por otra parte, Paquillo, plata en las tres últimas competiciones mundiales de 20 kilómetros marcha, todavía no ha presentado ningún justificante a la federación, por lo que no ha percibido ningún reembolso de los 25.000 euros que tiene para estos menesteres.

"Si le damos todo lo que pide, se lleva casi todo el presupuesto. Y otros también ganan medallas", dice el presidente

Sin embargo, pese a todos estos preámbulos favorables a Paquillo Fernández, la federación no piensa ni a corto ni a largo plazo conceder el carácter de técnico a Korzeniowski, quien compatibiliza la preparación de Paquillo con las del ruso Ilya Markov y la irlandesa Gillian O'Sullivan, entre otros, además de con la gestión de sus empresas y de su trabajo como jefe de deportes de la televisión polaca. Y ello, por varias razones, según diferentes fuentes federativas.

La primera es la mayor. "En realidad", dice José Luis de Carlos, jefe del equipo español en los Mundiales y director general de la federación, "Korzeniowski, más que su entrenador en el sentido tradicional, es el supervisor técnico, un planificador que no está todos los días con él a pie de pista trabajando". La segunda razón es filosófico-histórica. Pese a los cambios de orientación en el CSD, la federación de atletismo no contratará técnicos extranjeros. De hecho, en los últimos meses se han ofrecido para trabajar en la federación técnicos rusos y cubanos de altísimo nivel a los que se les ha dicho que no. Su lema, una política plenamente apoyada por el CSD, cuyo presidente, Lissavetzky, considera "muy positivo" el mandato de Odriozola, es la de que la riqueza de un atletismo se mide también por la riqueza de sus técnicos. En la federación recuerdan los casos del técnico personal de Sandra Myers, la velocista norteamericana nacionalizada, o el del técnico alemán con el que trabajó un año Niurka Montalvo. Ninguno de los dos creó equipo. Terminado su trabajo, desaparecieron del mapa. "Nosotros preferimos que el técnico español crezca al mismo tiempo que las necesidades de su atleta, que se forme en el extranjero, que se faje aquí, que asista a seminarios...", dice De Carlos; "si, por ejemplo, hace años hubiéramos contratado un técnico de fuera para lanzamientos, que era nuestro punto débil, ahora no existiría Charly Burón, que ha sacado a Manolo Martínez y Mario Pestano y que, sin salir de León, se ha convertido en uno de los entrenadores más reputados del mundo".

La tercera razón es el cúmulo de desencuentros que se ha producido entre Paquillo Fernández y la federación desde que el granadino les habló de la posibilidad de irse con Korzeniowski. El más importante llegó cuando Odriozola se enteró por un reportaje en un periódico de que se había sometido en Polonia a una sesión de crioterapia en una cámara frigorífica a -100 grados centígrados. A la federación le preocupó de entrada que el método no fuera bueno para la salud y, al darse cuenta de que apenas tenía noticia de las andanzas de Paquillo con Korzeniowski, le entró la duda recordando el caso de Muehlegg, a quien la federación de esquí le permitió hacer lo que quisiera. "Si le damos a Paquillo todo lo que nos pide", concluye Odriozola, "él sólo se lleva casi todo el presupuesto de la marcha española. Y hay otros marchadores que ganan medallas."