El Rey pide implicación empresarial frente al drama de la inmigración

El Rey pidió ayer al mundo empresarial que participe de forma activa en lograr una "adecuada política de desarrollo económico y social", que acabe con los "graves problemas humanos, tantas veces dramáticos, que plantea la emigración ilegal". Juan Carlos I hizo este llamamiento en la inauguración de la asamblea de la Asociación de Cámaras de Comercio del Mediterráneo (Ascame), que se celebra en Málaga.

La XVII asamblea general de Ascame reúne desde ayer en el Palacio de Ferias y Congresos a representantes de 350 cámaras de comercio, industria y navegación de 18 países del arco Mediterráneo, según su secretario general, Anwar Zibaoui. Creada hace 23 años, representa a más de 20 millones de empresas.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, resaltó en su discurso la necesidad de convertir al Mediterráneo en un "espacio de calidad y competitividad", y de "estrechar lazos o viejos contactos" para afrontar conflictos como el de Oriente Próximo. El ministro de Industria, Comercio y Turismo, José Montilla, destacó la conveniencia de crear "espacios de cooperación y diálogo".

Para Zibaoui, hay que concienciar a los empresarios del "valor de una alianza estratégica" entre el norte y el sur del Mediterráneo, que genera un negocio equivalente a un tercio del producto interior bruto mundial, gracias al turismo. El objetivo es "apoyar el comercio intermediterráneo" y "las alianzas para enfrentarse a retos de la globalización como la competencia china en el sector textil".

Los intercambios de España con sus vecinos del Mare Nostrum sólo suponen el 2% del total. La creación progresiva de una zona de libre comercio euromediterránea que culmina en 2010, decidida en la cumbre de hace diez años en Barcelona, debería dar "continuidad económica a la UE", dijo Zibaoui, que destacó que la Unión es el primer socio comercial de los países ribereños, con un 70% de los intercambios, mientras que el 12% de las exportaciones europeas se dirigen a esta zona.

En la asamblea, que termina hoy, se tratará de la primera cumbre empresarial entre países mediterráneos y de la UE, que se celebrará en Barcelona en noviembre. Ascame y otras organizaciones pedirán la creación de un banco que facilite la integración económica euromediterránea, y políticas activas y directas de apoyo a las pymes.