Campbell se anota su primer 'grande' ante Woods y García

No hay un Campbell más conocido en Auckland que sir John Logan Campbell, un escocés que dejó Edimburgo a mediados del siglo XIX para asentarse en Nueva Zelanda. Se casó con una mujer de origen maorí, se convirtió en alcalde de la capital y, a su muerte, se le levantó un obelisco como muestra de respeto a este unificador de razas. Sin embargo, uno de sus bisnietos, Michael Campbell, está a punto de robarle el protagonismo tras ganar su primer Abierto de Estados Unidos, en Pinehurst (Carolina del Norte), y regalar a su país su primer título grande en el golf desde que en 1963 sir Bob Charles venciera en el Open Británico.

Un inesperado colapso del surafricano de hielo, Retief Goosen, que sumó seis bogeys y un doble bogey en 13 hoyos, y una espectacular remontada del norteamericano Tiger Woods dejó el torneo patas arriba y con diez aspirantes al triunfo. Pero Goosen acabó a ocho golpes del líder, algo para olvidar, y aún les fue peor a otros. Al menos, Sergio García completó una excelente última ronda y logró un magnífico tercer puesto, aunque a cinco de Campbell, y quizá tendrá pesadillas con su sábado, en el que desperdició una espléndida ocasión.

En un día nublado y ventoso, Campbell no cometía errores y sólo la agresiva sombra de Woods, abonado a los birdies,podía hacer temblar el pulso al maorí, el único jugador al par del campo y que en su día fue considerado una gran promesa. En 1995, y con sólo 25 años, fue tercero en el Open Británico. Pero una grave lesión en su muñeca derecha le hizo desaparecer... hasta 2001, cuando firmó una carta en Sports Illustrated amenazando a los organizadores del Abierto de Nueva Zelanda con negarse a defender su título si no reducían los precios de las entradas: habían aumentado de 18 a más de 180 euros para cubrir los más de 2 millones de fijo de Woods.

Clasificación final: 1. M. Campbell (NZ), 280 golpes. 2. T. Woods (EE UU), 282. 3. S. García, T. Clark (SA) y M. Hensby (Aus.), 285.