Fieles valencianos viajarán a Roma para los funerales de Juan Pablo II

La muerte del Papa marcó ayer el inicio de los actos de conmemoración del 550º aniversario de la canonización de Sant Vicent Ferrer. El arzobispo Agustín García-Gascó dedicó a Karol Wojtyla la misa celebrada en la catedral de Valencia y pidió que el homenaje continuara con el rezo de un rosario durante la procesión. Decenas de fieles católicos se preparaban para asistir en Roma a los funerales del Pontífice.

El arzobispado de Valencia hizo público un comunicado en el que afirmaba que la compañía Trasmediterranea fletaría mañana un barco para transportar a "mil peregrinos valencianos al funeral de Juan Pablo II". La empresa aclaró que el ferry, que partirá a las 11.00 desde Barcelona y llegará a la capital italiana a las 8.00 del jueves, está abierto a cualquier ciudadano.

El Arzobispado se hizo eco de las iniciativas de los fieles valencianos de distintas parroquias decididos a asistir al entierro del Papa polaco. Citaba entre ellos a los de la parroquia Nuestra Señora de Lluch, en Alzira, que partieron ayer hacia Roma por carretera.

Capítulo especial mereció en la nota del Arzobispado la movilización de los "miembros y cooperadores" del Opus Dei, como los jóvenes del colegio mayor La Alameda y del colegio Guadalaviar, según había sido informado por "fuentes de la Prelatura Personal en Valencia".

El papel desempeñado por Juan Pablo II durante sus 26 años de pontificado fue elogiado ayer por el rector de la Universidad Cardenal Herrera-CEU de Valencia, Alfonso Bullón, quien le definió como "uno de los personajes clave de la historia del siglo XX", para añadir que "sin su hacer continuo, testimonio y ejemplo, no se comprenderían muchos capítulos de la humanidad".

La comisión permanente del Consell de la Joventut de la Comunitat Valenciana le describió como un "infatigable defensor de la paz", y como uno de los pontífices que más "se ha acercado a los jóvenes y que más ha creído en ellos".

El comunicado del Arzobispado incluía también la salida, ayer por la mañana, hacia Roma, de José Salvador Murgui, alcalde de Casinos (El Camp de Túria) "que enviaba desde hacía 13 años turrón a Juan Pablo II por Navidad, en septiembre y Pascua".