A la espera de Ronaldo
El madridista retrasa su regreso desde Brasil al confirmarse el embarazo de su pareja, Daniela Cicarelli, y es dudoso para jugar en Albacete
Vanderlei Luxemburgo recibió en su teléfono móvil un mensaje de Ronaldo ayer por la tarde mientras dirigía el entrenamiento del Madrid. Así supo el técnico, de primera mano, que su máximo goleador llegaría con un día de retraso de Brasil, a donde acudió para jugar dos partidos de clasificación mundialista. El percance, debido a "problemas personales", según la versión oficial del Madrid, compromete la presencia del delantero mañana en Albacete, donde el Madrid se jugará las exiguas posibilidades que le quedan de competir por algo esta temporada. También por "problemas personales" se perdió Ronaldo el partido contra el Numancia cuando debió irse a Río de Janeiro el 30 de enero.
Luxemburgo ensaya cambios como devolver a Figo a su vieja posición de extremo derecho
Ronaldo tuvo esta vez que permanecer en Brasil para acompañar a su pareja, Daniela Cicarelli, hospitalizada unas horas en la noche del jueves tras sufrir un desmayo cuando asistía con él a una boda después del Uruguay-Brasil, en Montevideo. Poco después, la modelo anunciaba en una nota oficial que estaba embarazada. Será el segundo hijo del jugador, que ya es padre de Ronald, un niño de 5 años que vive en Barcelona con su madre, Milene Domingues. El retraso en la llegada de Ronaldo le impidió entrenarse ayer con el equipo, como Roberto Carlos. Si hoy Ronaldo aterriza en Madrid a la hora prevista, las seis de la mañana, Luxemburgo le esperará a las diez para el último entrenamiento antes de viajar a Albacete. El partido, último de la jornada de Liga, será mañana a las nueve de la noche. Más allá espera el clásico contra el Barcelona, el siguiente domingo en el Bernabéu.
La semana de compromisos de las selecciones se ha saldado con pérdidas para el Madrid. El jueves se supo que Beckham no acudiría a Albacete porque sufre una elongación en la pierna izquierda. Ayer llegó Roberto Carlos de Brasil y, aunque se entrenó bien, dio muestras de fatiga y dolores en la cadera. El lateral será titular en Albacete, pero es muy probable que, con 31 años, sus tiempos de recuperación rápida tras los viajes transoceánicos hayan terminado. Casillas, aún con molestias, sólo dedicó la tarde a trabajos de recuperación.
Si Ronaldo se incorpora al entrenamiento de hoy, como espera Luxemburgo, su presencia en el equipo titular para jugar contra el Albacete es prácticamente segura. Si llega a Madrid, pero no se entrena, los precedentes y la costumbre de Luxemburgo indican que permanecerá en el banquillo, al menos al inicio del partido. Este contratiempo dificultará la intención del goleador de romper una mala racha que coincide con el derrumbe de su equipo: lleva dos jornadas sin marcar en la Liga -su último tanto lo celebró el 5 de marzo, en Mestalla) y cuatro sin hacerlo con Brasil. En la Champions pasó por la eliminatoria adversa contra el Juventus sin alterar el marcador.
Al cierre de esta edición, fuentes próximas a Ronaldo confirmaron que el jugador se disponía a abordar el avión que lo trasladaría desde Río a Madrid.
Además de las bajas por problemas físicos y personales, el Madrid sufrirá la ausencia de Zidane, sancionado. Estas dificultades han forzado a Luxemburgo a ensayar diversos cambios. El más notable fue el que puso en práctica en el partido de entrenamiento del jueves, cuando trasladó a Figo a su vieja posición de extremo derecho, con Solari pegado a la banda izquierda, Guti de segunda punta y Celades en el medio centro junto a Gravesen. Esta formación supondría no sólo un cambio en el dibujo acostumbrado, sino una contradicción de Luxemburgo respecto a sus convicciones. El entrenador ha aclarado que no es partidario de jugar con extremos y que prefiere a Figo tirado al centro del campo, en labores de enganche.
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