"Lendoiro es muy agotador"

Zoran Vekic fue jugador del Valladolid y después montó una tienda en la ciudad castellana. Al poco, por casualidad, entró en el mundo de los agentes. Hoy es uno de los cinco más importantes de España y lleva los asuntos de 50 futbolistas, entre ellos Hierro o Guti. También participó en el fichaje de Eto'o por el Barcelona.

Pregunta. ¿Su mercado es la ley de la selva?

Respuesta. En los buenos tiempos funcionaban entre 15 y 20 representantes. Ahora hay unos 300. Es bueno que todos tengamos un número de licencia, así estamos registrados, sabemos que los clubes y la federación se van a dirigir a nosotros. Tengo la licencia número 1.

P. ¿Es un negocio en recesión?

R. Ahora ha bajado mucho el tema de los fichajes. Ya no se paga lo que se pagaban por jugadores como Catanha (2.000 millones de pesetas) o Munitis (2.500 millones), ahora hay más dificultades. Ahora no hay dinero y sobran jugadores.

P. ¿Y eso en qué ha cambiado el negocio?

R. Antes existía la figura del intermediario. Este traspasaba al jugador a un club, cobraba y punto. Ahora hay detrás de los jugadores contratos de marketing, publicidad, asesores...

P. ¿Tiene delegaciones?

R. Tengo a gente en Holanda, Bélgica, Yugoslavia y Alemania. P. ¿Cuál ha sido su mejor adquisición?; ¿Y su mayor problema?

R. He realizado operaciones muy importantes a nivel de traspasos, por ejemplo, cuando el Parma pagó al Zaragoza 4.500 millones de las antiguas pesetas por Milosevic.

P. ¿La más dura?

R. Uno de los más difíciles fue el de Samuel Eto´o. Durante dos meses trabajamos muy duro día tras día. Después de la temporada que está haciendo, un directivo del Madrid me dijo que no se trató de una cuestión económica, que fue un fallo del Madrid porque nunca tendrían que haberle vendido al Barça. Otra operación complicada fue la de César al Madrid. Nunca se habían pagado 1.000 millones por un portero. César se tuvo que quedar un año cedido en el Valladolid y después se fue al Madrid.

P. ¿Con quién cuesta más negociar?

R. Lendoiro es muy agotador.

P. ¿Cuál ha sido la reunión más larga y el sitio más raro donde ha llevado una negociación?

R. Por lo menos habré tenido a lo largo de mi carrera como representante unas diez operaciones que duraron más de 20 horas seguidas. La renovación de Hierro con Mendoza. Cuando Lorenzo Sanz intentó vender a Prosinecki al Atlético y el Barça se metió por medio. Cuando Oscar fichó por el Zaragoza estuvimos siete u ocho personas metidos en una oficina muchas horas. La más rara fue en un pueblo que no me acuerdo del nombre. Está entre Salamanca y Valladolid. El Madrid se enteró de que el Barcelona estaba detrás de Ognjenovic. Tuvimos que traer al jugador sin permiso y sin visado a España.

P. ¿Hay muchos piratas en la profesión?

R. Sí, claro que los hay.

P. Como en la película Jerry Mcwire ¿Cree que el trato con sus representados es personalizado?

R. Benjamín me llama muchas veces Jerry en broma (risas). Yo tengo un trato personalizado con mis representados