La Junta destinó 11,4 millones en ayudas sociales a familias sevillanas

El Programa de Solidaridad con los Andaluces, que dota de un salario mínimo a las familias económicamente desfavorecidas, invirtió el año pasado 11,4 millones de euros en la provincia de Sevilla. Esta suma se destinó en su mayor parte a sufragar el salario social de 4.289 familias sevillanas, que percibieron entre 285 y 460 euros durante seis mensualidades en 2004. De las 4.289 familias solicitantes de este salario, 2.099 residían en la capital hispalense y 1.467 en la provincia, según informó la Delegación de la Consejería para la Igualdad en Sevilla.

Las ayudas se destinaron a núcleos familiares cuyos salarios fueron inferiores al Ingreso Mínimo de Solidaridad, que el año pasado se cifró en 285,51 euros.

El 22% de los solicitantes formaba núcleos familiares unipersonales; el 37%, unidades familiares monoparentales y el 41%, parejas con hijos. El perfil medio de estas últimas era el de un matrimonio, o pareja de hecho, de entre 20 y 45 años, en su mayoría con hijos a su cargo, residentes en barriadas con especial problemática social y que sufrían serias dificultades para acceder al mercado laboral debido, entre otras razones, a su bajos niveles formativos.

Formación laboral

Según la Consejería, el Programa de Solidaridad no se limita a ser una mera prestación económica asistencial. Además de dotar de un salario mínimo a las personas beneficiarias, se fomenta que ellas mismas y su entorno familiar accedan a un empleo. Con este objetivo, la Consejería de Igualdad, junto con los principales Ayuntamientos de la provincia, desarrolló cursos de alfabetización de adultos, adquisición de titulaciones académicas básicas y formación laboral.

Así mismo, se trató de generalizar la escolarización de los niños de estas áreas, y de regularizar su asistencia a las aulas. En este sentido, desde la Delegación de Educación de Sevilla se tramitaron 27 requerimientos de escolarización de menores. Por lo que respecta a la población adulta, la Delegación de Empleo integró a 279 personas en distintos gabinetes de orientación para emprender itinerios personalizados dentro de proyectos de inserción sociolaboral.

Según la Consejería, cada vez son más las personas que cobran el salario social y forman parte a su vez de alguno de estos programas de incorporación al mundo del trabajo.

La Junta destacó que la demanda de este tipo de ayudas ha decrecido un 28% con respecto a 2003. En cambio, la resolución de expedientes de los solicitantes se incrementó un 4,6%. Para la Consejería de Solidaridad, este aumentó se debió a la agilización del programa de tramitación de solicitudes aplicado en 2004, que facilitó el pago de las ayudas y mejoró el grado de coordinación institucional y la colaboración de las diferentes entidades sociales implicadas en la lucha contra la exclusión.