¿Quieres ser tripulante del 'Iberdrola'?

El Iberdrola lo tiene casi todo. Tiene director técnico (el neozelandés John Cutler), director deportivo (el doble campeón olímpico Luis Doreste), diseñador (el norteamericano Phil Kaiko), un comité ejecutivo formado por tres personas, tres pesos pesados del único proyecto español para la Copa del América de 2007, en Valencia: el principal promotor del equipo, Agustín Zulueta, el vicepresidente de la Federación Española, Manuel Xirivella, y el navegante Pedro Campos, amigo del Rey, sobrino del ex presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo-Sotelo y uno de los personajes más influyentes de la vela española. Por tener, el Iberdrola, inscrito hace apenas mes y medio, tiene hasta dos veleros con los que se entrenará la tripulación antes de contar con el definitivo, con el que competirá en 2007. Lo único que le falta al Iberdrola, con 60 millones de euros de presupuesto, son tripulantes. Sí, como suena.

"¿Quieres ser tripulante en la Copa del América? ¿Tienes experiencia en la Copa del América? ¿Estarías dispuesto a trasladarte de ciudad para integrarte en un proyecto de tres años? ¿En caso de tener familia, verías necesario trasladarte con ella? ¿Cuánto dinero quieres ganar?" Todas estas cuestiones y algunas más completan el formulario que la Federación Española de Vela ha volcado en su página web.

"El formulario estaba preparado hace tiempo, antes incluso de inscribir al equipo", afirma Manuel Xirivella; "el Iberdrola es un proyecto abierto, por eso queremos dar la oportunidad a todos los regatistas españoles. Que me conste, se han recibido ya 40 currículos". Ante la sorpresa, e incluso la chanza que ha despertado la iniciativa de la federación en algunos sectores de la vela, Xirivella se defiende: "España tiene grandes tripulantes, no sólo los famosos que están en equipos extranjeros. Hay gente enrolada en el circuito de cruceros que está muy preparada. Debe quedar claro que el Iberdrola no va a ser una escuela de vela, eso seguro".

La tardanza en formalizar el proyecto condujo a los mejores especialistas nacionales a fichar por desafíos extranjeros o embarcaciones preparadas para otras regatas, como la Volvo Ocean Race, la vuelta al mundo con tripulación y escalas. El Iberdrola necesita ahora unos 35 tripulantes para poder entrenar con dos barcos, crucial en cualquier equipo con aspiraciones. Y el español pica alto.

No es la primera vez, en todo caso, que se recurre a curiosas prácticas de captación de regatistas.

El variopinto mundo de las tripulaciones reserva muchas sorpresas: el K-Challenge, desafiante francés para 2007, cuenta en su equipo con el pertiguista Jean Galfione, campeón olímpico en Atlanta 96 y un icono homosexual en Francia. Y en el año 2000, el equipo español, el Bravo, contrató a un portero de discoteca para un puesto en el que sólo se requiere fuerza pura y dura. A éste le avaló una espalda descomunal, la misma que ahora pone al servicio del Iberdrola.