Ripoll reitera que "hay razones suficientes" para que Ortuño deje el PP y no sea delegado del Consell
El pulso entre campistas y zaplanistas se mantiene en Alicante. Ayer el nuevo presidente del PP en la provincia de Alicante, José Joaquín Ripoll, reiteró que "hay razones suficientes para que Manuel Ortuño, (actual subdelegado del Consell en Elche), no esté en el partido", por tanto, "lógicamente tampoco debía estar en un cargo institucional", dijo sin tapujos en conferencia de prensa.
Ripoll reconoció que había mantenido conversaciones al más alto nivel con Acebes y Trillo, en las que pidió a los órganos del partido que "cuanto antes" tomen una decisión sobre los expedientes informativos abiertos contra Manuel Ortuño. El presidente del PP, en su primera comparencia ante la prensa después del congreso de Altea, en el que fue elegido, anunció que la próxima reunión de la dirección provincial el 14 de enero, hablarán "algo" del tema de Ortuño, ya que el subdelegado del Consell "tiene expedientes disciplinarios ante el Comité de Derechos y Garantías autonómico y también en el nacional y se sustanciarán".
Sin embargo, minutos después, en Valencia, el portavoz del Consell, Esteban González Pons, repitió "todas y cada una de las palabras" del vicepresidente, Víctor Campos, que afirmó que desde la Generalitat no se tiene previsto adoptar ninguna decisión relacionada con el subdelegado del Consell en Elche. Por su lado, el portavoz adjunto del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, Andrés Perelló, acusó al Gobierno valenciano de no destituir al subdelegado del Consell en Elche, Manuel Ortuño, y mantenerlo en el cargo "con el único argumento del miedo a que cuente lo que sabe." En un comunicado, el diputado autonómico consideró "previsible" que el PP no adopte medidas contra el político ilicitano porque el presidente regional de este partido, Francisco Camps, "tiene las manos atadas por los conocimientos del personaje", afirmó.
Al margen del futuro político de Ortuño, Ripoll valoró la primera reunión del nuevo comité ejecutivo provincial del PP, que repartió sus competencias y fijó su rumbo. El presidente provincial anunció "una renovación en cascada" del partido en la provincia con motivo de la celebración de asambleas locales en todos los municipios durante el primer semestre del próximo año, incluida Alicante, donde desde hace casi diez años se mantiene la misma dirección, que todavía preside Diego Such. El presidente del PP alicantino abogó por "listas únicas" en todas las localidades y resaltó que los concejales serán miembros natos de las direcciones, al tiempo que consideró que no es obligatorio que coincidan los presidentes con los candidatos a las alcaldías o alcaldes. Ripoll defendió que "el espíritu de Altea [localidad en la que fue elegido]" inaugura una nueva etapa de cohesión interna.
