"No hay muchos jugadores que tengan mi físico"
Con el brasileño Julio Baptista, (1981, Sao Paulo) luciendo fútbol y potencia, el Sevilla ha dado un salto de calidad extraordinario, como demuestra en la Liga española y en su triunfal periplo europeo. Llegó la pasada temporada sin hacer demasiado ruido y el público del Sánchez Pizjuán descubrió a un futbolista con un físico asombroso, al que le venía al pelo el sobrenombre de La Bestia y que demostraba una enorme facilidad para el gol. Veinte tantos marcó en el pasado ejercicio de Liga, y seis lleva en el actual, el último ayer, ante el Athletic, en un soberano lanzamiento lejano marca de la casa.
Pregunta. Usted llegó al fútbol español la pasada temporada, con 21 años, cuando el Sevilla le compró su ficha al Sao Paulo. Igual que decenas de futbolistas jóvenes cada temporada. ¿Sabía usted algo del equipo o del país al que venía?
"Mi biotipo es muy fuerte, muy potente y, claro, aliado con la calidad. Pero no es tan importante, cada jugador tiene sus características y su valía"
"Aún me falta para encontrar mi mejor forma. Pero soy más maduro, y ahora me pego una carrera en vez de tres, pero que me sirve para marcar un gol"
Respuesta. La verdad es que no. Uno se va enterando de las cosas cuando ya está en el lugar en el que va a trabajar. De repente, te cambian todas las formas de vivir la vida que uno tenía en su país para aprender a hacerlo como lo hacen las personas del lugar al que has llegado.
P. ¿Se pasa mal?
R. De ninguna manera. Yo me esforcé en adaptarme lo más rápido posible a Sevilla y España. Además, si uno se lo pasa bien dentro del campo, fuera también le van las cosas magníficamente.
P. Su madre se ha trasladado a Sevilla con usted y, además, le mima cocinando sus platos brasileños favoritos.
R. Sí, mi madre está conmigo, ya se ha integrado en la ciudad, tiene amigas y la verdad es que estamos muy bien. Y cocina de todo y muy rico (risas).
P. Pero ahora el club ha contratado a un experto en nutrición que tiene a algunos en un sinvivir, como a Esteban, que ha adelgazado siete kilos. ¿Usted cómo lo lleva?
R. Hombre lo de la leche desnatada y no tocar la mantequilla...
P. ¿También es diferente la vida dentro de los clubes de uno u otro lado?
R. En general, no creo que haya mucha diferencia. Aunque sí que se trabaja con una intensidad distinta. Por ejemplo, esta temporada, es normal que con tantos partidos seguidos, domingo, miércoles, domingo, miércoles... nosotros trabajemos algo menos en los entrenamientos. En Brasil también se rebaja el ritmo entre semana cuando los partidos son muy seguidos, pero de forma distinta.
P. ¿Mejor o peor?
R. Distinta.
P. Al inicio de la pasada temporada, usted no era más que un mocetón desconocido, pero, con la veintena de goles que hizo, se ll terminó considerado como un superclase. ¿Cómo le va en el segundo curso?
R. Lo estoy llevando muy bien. Hombre, me resulta un poco más complicado porque los equipos y los jugadores ya me conocen más. Ahora, casi siempre me hacen marcajes especiales; a veces me cubren en zona, otras se me ponen delante dos contrarios en cuento recibo el balón... y la verdad es que es un poco más difícil. Pero eso es lo normal y además es mi trabajo y lo que tengo que hacer es llevarlo bien, estar bien de forma y esforzarme en el campo.
P. Pero es que sorprendió hasta por la demarcación que ocupó. En Brasil era mediocentro.
R. Fue Caparrós el que me colocó en la media punta, pero si se necesita que juegue más atrás no me importaría, conozco muy bien la zona y he jugado casi toda mi carrera ahí. Sé jugar ahí y un poco más atrás si hace falta.
P. Da la impresión de estar un peldaño menos arriba porque, aunque sigue marcando goles y salvando papeletas al Sevilla, su juego no es tan protagonista.
R. Es posible que no esté encontrando la forma porque no he tenido vacaciones y por mi lesión en la Copa América. Todos necesitamos un tiempo para coger un ritmo bueno para estar bien.
P. O sea, que aún no está en forma.
R. Yo creo que aún me falta, pero estoy trabajando para poder llegar a mi mejor nivel de juego.
P. ¿Se ve usted mejor futbolista que la temporada pasada?
R. Con los años aprendes a correr menos y a colocarte mejor en el campo, los futbolistas sentimos cómo nuestro juego va madurando y cambiando.
P. Más maduro, entonces.
R. Sí, mucho más. Lo que decía antes, a lo mejor ahora me pego una carrera en vez de tres, pero que me sirve para marcar un gol o dar un pase de gol. El jugador tiene que ser listo y cuando está en el campo poner su esfuerzo en aquellas cosas que sean interesantes.
P. ¿Qué importancia tiene su físico?
R. La verdad es que en el fútbol no hay muchos jugadores con un biotipo, un físico, como el mío, muy fuerte, muy potente y, claro, aliado con la calidad. Pero no es tan importante, cada jugador tiene sus características y su valía.
P. Durante la Copa América, los técnicos de Brasil aseguraron que tiene una descompensación entre la masa muscular anterior y posterior de sus piernas.
R. Sí, pero empecé una rutina de trabajos específicos y ya ha mejorado.
P. Y ese cuerpo lo tiene sin haber hecho pesas antes de llegar al Sevilla.
R. En Brasil había trabajado con pesas, pero únicamente el trabajo de mantenimiento para evitar lesiones musculares, pero nunca eso de machacarme todo el día en el gimnasio para ganar masa muscular.
P. ¿Cómo sueña el futuro de tu carrera?
R. Todo futbolista tiene que trabajar por vivir una carrera gloriosa, de muchas conquistas, de muchas cosas.
P. ¿Y eso lo puede alcanzar en el Sevilla?
R. Pues no lo sé. Hombre, trabajaré y me esforzaré lo máximo por lograr algunas de estas cosas con el Sevilla.
P. ¿Se plantea dar el salto a un equipo de mayor perfil deportivo?
R. Un día, quién sabe.
P. ¿Se sintió utilizado cuando el Barcelona anunció su interés por ficharle, aunque luego no pujara demasiado? Los aficionados sevillistas se enfadaron bastante con usted por dejarse querer.
R. No me sentí utilizado. Yo creo que se me valoró más como jugador al saber que un equipo del nivel del Barcelona me quería.
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