_
_
_
_
_

Piqué presenta al PP como el partido con un proyecto común para Cataluña y España

El congreso reelige al presidente con 10 puntos menos de apoyo que hace dos años

Frente a un PSC "cada vez más nacionalista e identitario" y una Convergència i Unió (CiU) "cada vez más soberanista", el Partido Popular (PP) se presenta ante la sociedad como el partido de quienes se sienten tan españoles como catalanes y el que defiende "un proyecto común de Cataluña y España". Con este mensaje cerró ayer el presidente del PP de Cataluña, Josep Piqué, el 11º congreso del partido. Avalado ante los congresistas por el líder del partido, Mariano Rajoy, Piqué fue reelegido presidente del PP catalán con el 81,4% de los votos. Es un apoyo significativamente menor que el que obtuvo en el anterior congreso, celebrado hace dos años, antes de que se iniciara el ciclo electoral.

La reelección de Piqué llegó sin problemas una vez que la dirección saliente logró frustrar el intento de presentar una candidatura alternativa llevado a cabo por el ex diputado leridano José Ignacio Llorens. El desenlace de la batalla librada en los pasillos del congreso entre Llorens y los colaboradores de Piqué desde la apertura del congreso, ayer por la tarde, se produjo poco después de las diez de la noche. La presidenta provincial del PP de Barcelona, Dolors Montserrat, sumó los avales de los que era depositaria a los que recogían el vicesecretario general Francesc Vendrell y Armand Querol en favor de Piqué.

Llorens logró sumar sólo 188 de los 235 apoyos que eran necesarios para poder presentar su candidatura. Reconoció la derrota y aseguró que a partir de hoy mismo se dedicará a articular el descontento de quienes creen que Piqué persigue "liquidar" el proyecto del PP de siempre, "el que sostiene que en España no hay más nación que España". Incluso recordó el pasado comunista de Piqué como "miembro de la Joven Guardia Roja".

A partir de aquel momento, el congreso pasó a seguir el guión de los cónclaves pensados para lanzar mensajes triunfales. Mariano Rajoy intervino a mediodía para pedir a los congresistas "el máximo apoyo" para Piqué y asegurar que cuenta con todo su respaldo. La intervención de Rajoy se dedicó a recordar que el PP sufrió el 14 de marzo de 2003 "un duro trance", a animar a los militantes, criticar al Gobierno socialista y asegurar: "Pronto seremos de nuevo Gobierno de España".

Entre los motivos aducidos por Rajoy para insuflar optimismo se contaba el hecho de que el PP es, a pesar de haber tenido que pasar a la oposición, un partido unido, que está afrontando sus congresos regionales sin mayores problemas. "Sólo ha habido dos listas en el de Extremadura", destacó. Eso ilustraba a la perfección el sentido último de las carreras que poco antes había habido en el congreso en busca de avales que cerraran el paso a Llorens.

Luego vino la elección de Piqué, que comportaba la de la nueva dirección. En realidad era la misma que se eligió en el anterior congreso, con algunas ampliaciones. Expresaba el pacto entre el aparato del partido controlado por los presidentes provinciales, los hermanos Fernández Díaz, y el propio Piqué. En la reelección de ayer, sin embargo, Piqué recibió el 81,4% de los votos (684) frente al 93% que obtuvo en el décimo congreso.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Es el precio del desgaste sufrido durante este periodo, en el que, como recordaba Llorens, el PP "ha pasado de ser decisivo a ser irrelevante", porque ya no condiciona la formación de mayorías en el Parlament.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_