El Gobierno balear oficializa la ruptura con el Ramon Llull

El Gobierno de Baleares, del PP, formalizó ayer la ruptura con el Institut Ramon Llull (IRL), una salida que se anunció en mayo pasado, en el curso de una fallida negociación entre los presidentes Jaume Matas y Pasqual Maragall, cuando la parte catalana propuso como director del IRL al editor Xavier Folch y el Ejecutivo balear quiso que fuera el escritor Gabriel Janer Manila.

La resolución, anunciada tras el Consell Executiu, alude al "acuerdo de separación de la comunidad autónoma" del consorcio del IRL -hasta ahora presidido por turno por el consejero balear Francesc Fiol- para la promoción internacional de la lengua y cultura catalanas. El desenganche institucional y financiero de Baleares -cuyo plazo definitivo expira a los seis meses del anuncio de la ruptura- facilitará la adecuación de los órganos patronales, rectores y directivos a la nueva situación, y dará manos libres a la Generalitat catalana para desplegar su programa de acción, nombramientos y posibles alianzas externas sin la sujeción a un sistema paritario que había quedado bloqueado desde enero de 2004 tras el cambio político en Cataluña.

De manera paralela a la secesión de Baleares del IRL, del que formaba parte desde el 4 de diciembre de 2001 -el convenio se firmó en abril de 2002-, el Gobierno de Jaume Matas crea el cargo de comisionado director para renovar el antiguo Institut d'Estudis Baleàrics, con la intención de emular al IRL y gestionar sus mismas competencias en Baleares. Como estaba previsto, al frente del instituto baleárico se sitúa a Gabriel Janer Manila.

El PP señala que el Institut d'Estudis Baleàrics será la "entidad instrumental de carácter cultural e investigador y medio de expresión y comunicación social de la cultura y lengua propias", que trabajará "en colaboración con las instituciones y entidades culturales y científicas de ámbito balear y estatal".

Para recalcar el rango y el peso no político de Janer, el Gobierno balear recordó que los comisionados responden al perfil de "personas de prestigio reconocido que con carácter temporal desarrollan funciones concretas de representación de la comunidad autónoma en los ámbitos y foros que se determinen".

Desde marzo de 2003, el IRL tiene abierta una sede de carácter testimonial en Palma de Mallorca -que ahora asume el organismo baleárico-, al frente de la cual había un director adjunto, un jefe de prensa y una mínima estructura administrativa que quedan integrados en la del nuevo instituto balear.