_
_
_
_

Casey alerta de la dificultad de defender la historiografía de "cierta tendencia a la teología"

El hispanista norirlandés y el Nobel Kurt Wüthirch, 'honoris causa' por la Universitat

"Las ideologías de toda índole buscan raíces que sólo ellas son capaces de identificar, inventando las tradiciones que justifiquen su postura particular en el presente", reflexionó ayer el hispanista norirlandés James Casey, tras ser investido doctor honoris causa por la Universistat de València junto al penúltimo Nobel de Química, Kurt Wüthirch. Casey alertó sobre "la dificultad de la historiografía actual para defenderse de cierta tendencia a la teología". En su opinión, el historiador debe "respetar la autonomía del pasado" y "no acercarse a él como fuente del presente".

Casey realizó una profunda autocrítica sobre la historiografía actual al afirmar que "hay que constatar que la demografía histórica no ha dado de sí todo lo que se esperaba", debido, entre varias razones, a "la tendencia común a todas las ciencias a especializarse demasiado, exigiendo un rigor científico que aterra al aficionado y empobrece el diálogo". De continuar así, "el peligro que corremos en las facultades es pasar de ser buenos científicos a excelentes técnicos", precisó recordando la invitación hecha ya en 1941 por el historiador Marc Bloch para mantener "una actitud abierta hacia el otro" . "El desafío para la humanidad no ha cambiado, y la llamada de Bloch mantiene hoy su significado", resumió Casey.

El historiador -que fue investido doctor honoris causa en un acto celebrado en el edificio histórico de La Nau presidido por el rector Francisco Tomás- participó en 1971 en el I Congrés D'Història del País Valencià y es autor de diversos estudios entre los que destaca su tesis The Kingdom Of Valencia in the Seventeenth Century, que se leyó en Cambridge en 1968, aunque no se tradujo al catalán y al castellano hasta 1981 y 1983, respectivamente, tal y como recordó el profesor Manuel Ardit en su laudatio. Es su obra, resaltó el rector, la que ha contruido a sacar a la Comunidad Valenciana de su "invisibilidad histográfica en el mundo académico internacional". Tomás apeló, pues, a la "tenacidad" y al "espíritu de superación" como rasgos que unen a Casey y al químico Kurt Wüthrich, que en su discurso destacó "la importancia de transferir los resultados de las investigaciones en aplicaciones prácticas". Su "gran aportación", empero, según recordó el profesor de la Universitat Bernardo Celda, reside en "sus avances para la comprensión de la estructura en disolución de las micromoléculas fundamentales de la vida, las proteínas y el ADN y ARN".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_