Enredos a la hora de la siesta

Novedades para la hora de la siesta. En los últimos tiempos, las cadenas se han repartido esta franja horaria por géneros: culebrones latinoamericanos y telenovelas españolas (TVE-1), documentales de los más variados asuntos (La 2), cotilleo agresivo como el de Aquí hay tomate (Tele 5) y magacines tipo Sabor a ti (Antena 3). En un bloque horario dominado habitualmente, en cuanto a número de espectadores, por La Primera, seguida de Tele 5, Antena 3 intentará a partir de mañana arañar unos puntos de cuota de audiencia con el estreno de la comedia de enredo La sopa boba (de lunes a viernes, a las 15.45). Con esta tira diaria, la cadena privada gestionada por Planeta remodela la banda de sobremesa y acorta de nuevo -como antes hicieron los resúmenes de La selva de los famosos o Diario de una boda- la duración del magacín de Ana Rosa Quintana Sabor a ti, que esta temporada no goza de su mejor momento.

Por primera vez, Antena 3 prueba suerte con este formato, que era "una asignatura pendiente", según reconoce Tedy Villalba, responsable de ficción de producción propia de la cadena. Y apuesta sobre seguro al encargar La sopa boba a Miramón Mendi, la productora de José Luis Moreno, que firma el exitoso Aquí no hay quien viva en el horario de máxima audiencia de los miércoles en Antena 3. Interpretada por Lolita Flores, María Barranco, Luisa Martín e Iñaki Miramón, entre otros, la comedia coral narra la vida de Julia (Lolita), que tras su divorcio debe hacerse cargo de tres negocios ruinosos que trata de sacar adelante con ayuda de sus tres hijos y de su mejor amiga (Barranco).

El proyecto deberá seducir a los fieles a este tipo de formatos, que en TVE -la cadena que más explota el filón- han cosechado sus mejores réditos. Valga el ejemplo de Calle Nueva, una de las incursiones de La Primera en la teleficción de emisión diaria de factura nacional,

que comenzó en septiembre de 1997 y se despidió en junio de 2000 tras 558 entregas, con una honrosa media de 2.270.000 telespectadores (21,7% de cuota de pantalla).

La cadena pública también obtuvo muy buenos resultados con las tres series de Europroducciones que se estrenaron entre el año 2000 y 2004: El secreto, La verdad de Laura y Luna negra, con 178, 129 y 151 capítulos, respectivamente. Luna

negra, que acaba de finalizar, fue seguida por una media de 2.612.000 seguidores (24,9%). Para Carlos Orengo, productor ejecutivo de las tres telenovelas y responsable de ficción de la compañía, estos datos ponen de relieve "el carácter adictivo" que tienen las teleseries. Algunas de ellas giran alrededor de historias tan antiguas como el mundo tratadas con mayor o menor sentido del humor o tono de comedia: vaivenes amorosos, odio, lucha de clases, problemas generacionales, pasados enigmáticos o intrigas maquiavélicas. Otras están más pegadas al mundo real: el futuro laboral, la solidaridad, la música, la inmigración o las drogas. Orengo señala que estos productos tendrían el mismo éxito en horario de máxima audiencia. "La única diferencia son los presupuestos que se manejan en una franja y otra. Naturalmente, el de la sobremesa es inferior, lo que implica numerosas limitaciones", añade.

Tele 5 también se apuntó -y muy fructíferamente- a la teleficción diaria con Al salir de

clase, en este caso centrada en los jóvenes. Con 1.200 episodios emitidos, es hasta la fecha la serie más longeva de la televisión española. Esta producción de BocaBoca se mantuvo en antena desde 1997 hasta que la dirección de la cadena decidió retirarla de la parrilla, en 2002, con una media de dos millones y medio de seguidores (21,6%). Pero Tele 5 estaba dispuesta a seguir explotando el negocio de los culebrones juveniles que había comenzado con tan buen pie. En diciembre de 2002 lo intentó con Veintitantos, también producido por BocaBoca. El escaso interés que suscitó -14,9% de la audiencia- obligó a la cadena a prescindir de ella al mes y medio de su estreno.

Tras el tropezón, la cadena privada volvía el verano pasado a apostar por una telecomedia para la hora de la siesta con Tres son multitud, versión española de Son amores, una serie de éxito en Argentina y para la que aquí se comprometió la grabación de 130 capítulos. Producida por Globomedia, a duras penas aguantó unas semanas en antena por culpa de unos datos bajo mínimos (1.143.000 espectadores, 13,3% de cuota).

También las cadenas autonómicas han encontrado en esta franja un inmejorable nicho de audiencia. El cor de la

ciutat, que el pasado viernes emitió el capítulo 778º, es el serial de sobremesa más longevo de los que ha producido TV-3 hasta ahora. Va por su cuarta temporada -empezó a emitirse en septiembre del año 2000-, y la cadena autonómica catalana está planificando la quinta. Todos los meses, alguno de sus episodios suele situarse entre los 10 programas más vistos de la cadena. La media de audiencia de esta temporada se sitúa en torno a los 716.000 telespectadores y un 42,2% de cuota.