Más ópera en el Festival Mozart

En el Festival Mozart de A Coruña soplan nuevos vientos. La ópera gana protagonismo en la línea artística dirigida por su nuevo equipo rector, encabezado por el director de orquesta italiano Alberto Zedda, referencia en la moderna interpretación rossiniana y responsable del certamen estival de Pésaro especializado en la obra de Gioachino Rossini. Zedda abrirá la oferta lírica coruñesa este viernes con una deliciosa rareza barroca, Los amores de Apollo y de Dafne, de Francesco Cavalli (1602-1675), en un montaje con dirección escénica, escenografía y vestuario de Pier Luigi Pizzi.

Nada menos que seis óperas figuran en la programación del Festival Mozart de A Coruña 2004 (hasta el 3 de julio). La primera cita es una obra con carácter de estreno absoluto en España. Con este montaje (teatro Rosalía de Castro, 21 y 23 de mayo), Zedda amplía los horizontes melómanos del festival y contribuye a la recuperación del legado de Cavalli, cuya figura volvió a la actualidad en 1993 con el éxito de La Calisto en el teatro de La Monnaie de Bruselas. El montaje del malogrado Herbert Wernicke, dirigido musicalmente por René Jacobs, permitió redescubrir el estilo y la imaginación de un autor esencial en la evolución del género operístico tras la revolucionaria aportación de Claudio Monteverdi.

Zedda, que dirigió una memorable Incoronazione di Poppea de Monteverdi en La Zarzuela de Madrid, juega con una baza segura en la recuperación de Los amores de Apollo y de Dafne: Pier Luigi Pizzi, director de escena enamorado de la estética barroca. Mariana Pizzolato, Marisa Martins, Assumpta Mateu, Soledad Cardoso y Mario Zeffiri encabezan el reparto y en el foso Zedda dirigirá a la Orquesta Joven de la Sinfónica de Galicia.

Una de las claves del éxito del Festival Mozart es la Orquesta Sinfónica de Galicia. Dirigida por Víctor Pablo Pérez, se ha situado en el pelotón de cabeza de las orquestas españolas, asumirá el protagonismo en las otras cinco óperas programadas y en la oferta concertística que se abrirá el día 21 con la monumental Missa Solemnis de Beethoven. Dos formaciones corales, el Coro de Cámara del Palau de la Música Catalana de Barcelona y el Coro de la Comunidad de Madrid, se unirán en una versión que contará con las voces solistas de Ruth Rosique, Iris Vermillion, Joan Cabero y Peter Mikulas.

La presencia mozartiana está servida por dos óperas de juventud. La primera es La finta gardiniera (Palacio de la Ópera, 4 y 6 de junio), en una producción de la Ópera de Niza, con dirección de escena de Emilio Sagi y dirección musical de Gustav Kuhn. En el sólido equipo vocal figuran Ruth Rosique, Carmela Remiggio, Carmen Oprisanu, José Zapata, Bruce Sledge y David Menéndez. El segundo título mozartiano es La obligación del primer mandamiento, un singspiel de carácter sacro, escrito por Mozart con apenas 11 años, que podrá verse en un programa doble junto a la deliciosa farsa en un acto de Rossini, La cambiale di matrimonio (11 y 13 de junio). Arnold Bosman y Luigi Squarzina firman, respectivamente, la dirección musical y escénica de estas obras, en una producción del Festival Rossini de Pésaro, con las voces estelares de María José Moreno, Agata Bienkowska, Aldo Caputo y Bruno de Simone.

Rossini gana protagonismo en la oferta operística del festival. La donna del lago, en versión de concierto en el Palacio de la Ópera (18 y 20 de junio), tendrá un terceto vocal irresistible: Juan Diego Flórez, tenor de referencia en el repertorio rossiniano, Ianno Tamar y Daniella Barcelona. Desprovista de la escena, y con una duración de casi cuatro horas, la joya rossiniana, dirigida por Zedda, viajará este verano a los festivales de Santiago de Compostela, San Sebastián y Santander.

La última baza operística de

la programación es un título de gancho popular, L'elisir d'amore, de Donizetti, en un montaje del Gran Teatro del Liceo de Barcelona, firmado escénicamente por Mario Gas y con dirección musical de Víctor Pablo Pérez al frente de la Sinfónica de Galicia (1 y 3 de julio). El tenor Antonio Siragusa, la soprano Patrizia Cofi, el barítono José Julián Frontal y el bajo barítono Carlos Chausson asumirán los papeles protagonistas, en un reparto de voces italianas y españolas.

En A Coruña las voces no sólo tienen el máximo protagonismo en las óperas. La soprano Luisa Castellani abre la oferta liederística con un fascinante y arriesgado programa consagrado a la moderna escuela italiana, con obras de Godofredo Petrasi, Luigi Dallapiccola, Luigi Nono y Luciano Berio. En dos de las tres páginas de Berio programadas, Castellani estará acompañada por varios solistas de la Sinfónica de Galicia. Los otros tres recitales correrán a cargo de tres voces habituales de Pésaro, las mezzosopranos Sivia Tró Santafé (un programa de música española), Marie-Ange Todorovic (canciones de autores franceses) y la poderosa contralto Ewa Podles (canciones de Chopin, Moniuszko, Dvorák y Chopin).

La línea artística del festival aumenta sus contenidos operísticos, pero reduce la presencia de la música de cámara -lo más destacado es la integral de los cuartetos de cuerda de Béla Bartok en dos sesiones a cargo del Cuarteto Keller- y los conciertos sinfónicos. Tras la Missa solemnis, de Beethoven, la segunda y última cita orquestal será el 2 de julio, bajo la batuta de Víctor Pablo Pérez, un programa Haydn-Mozart, con el pianista Piotr Anderzewski como solista del Concierto número 24 en do menor, K. 491, del genial compositor salzburgués.

El capítulo de recitales contará con los pianistas Nicolai Lugansky, Alba Ventura y Massimiliano Damerini, y el violinista Tedy Papavrami, que tocará los endiablados 24 Caprichos de Paganini; mientras que el Cuarteto Keller tocará en dos sesiones los seis Cuartetos de cuerda de Bartok, una de las cumbres de la música de cámara del siglo XX. El Trío de Cuerda Manuel Quiroga y la Orquesta de Cámara de la Sinfónica de Galicia, dirigida por el violinista Massimo Spadano, completan la programación.