"En el cine español existe una aversión a hablar de lo nuestro"

El jiennense Luis David Ruiz decidió hace diez años marcharse hasta Madrid para estudiar cine junto al catalán Llorenç Soler. En el año 2000, un premio en el festival de cortometrajes de Lisboa (Portugal) le permitió estudiar en California (EE UU) en pleno contacto con Hollywood. Aquí surgió un documental sobre los espaldas mojadas, premiado en México. Recientemente, Faces & Places, una película sobre la pasada edición del festival Etnosur de Alcalá la Real (Jaén) triunfó en Vancouver (Canadá) y Miami (EE UU). Ahora espera estrenar un corto erótico realizado en Francia.

Pregunta. Sus reconocimientos proceden del extranjero, ¿nadie es profeta en su tierra?

Respuesta. Estoy de acuerdo. Hace mucho que renuncié a que mis paisano reconozcan mi trabajo. De todas formas, el circuito de los cortos es muy reducido y si no llegas a la gran pantalla es como si no existieras.

P. ¿La única salida es un festival?

R. Para promocionarte, sí. Hasta ahora he podido trabajar gracias a ellos, que miman mucho a los cortos y a sus directores. Pero, lamentablemente, un corto nace para morir.

P. ¿Con qué se queda de Hollywood?

R. Como ocurre en cierta medida en Francia, allí viven por y para el cine. Me quedo con la disciplina del trabajo en equipo y el respeto que existe al director y productor.

P. Documental, cine social, erótico, ¿qué prefiere?

R. Concibo el cine no sólo como entretenimiento, también como una herramienta al servicio de la sociedad. El corto erótico Las Mareas es un trabajo de experimentación con compañeros que conocí en California.

P. ¿Siempre escribe sus trabajos?

R. Sí, el 80% del éxito de una película se encierra en la historia que se cuenta. Acceder a la cámara es lo de menos.

P. ¿Cómo ve las que cuenta el cine español?

R. Películas como las de Icíar Bollaín o Benito Zambrano están rompiendo con una tendencia que aún hoy persiste: la aversión a hablar de lo nuestro. Aún queda mucho que hacer y existen diferentes ópticas para explotar nuestro día a día, que no es el de un agente del FBI.

P. ¿Qué proyectos tiene?

R. Este verano quiero ir a México porque hay un proyecto internacional que promueve la Fundación Zapata para realizar un documental sobre las pésimas condiciones de vida de los indios del desierto de Tarahumara. También tengo otro proyecto junto al escultor catalán, pero afincado en Almería, Xavier de Torres, para dar vida a sus piedras en una especie de cuentos. Pero falta financiación.

P. Un sueño.

R. Realizar una película sobre los movimientos migratorios.