Ripoll asumirá la secretaría del PP pero quiere más competencias

El presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, asumirá esta semana la secretaría general del PP en la Comunidad Valenciana con Francisco Camps como nuevo presidente regional del partido. Los dos sectores llegaron ayer a un principio de acuerdo después de que Ripoll mantuviera por la mañana su intención de aspirar a la presidencia del partido. El órdago se lanzó para lograr que la secretaría tuviese alguna competencia ejecutiva y que se diesen garantías de que se respetará la cuota zaplanista.

Los zaplanistas no renuncian a nada y están dispuestos a hacer valer la mayoría que tienen en la Junta Directiva Regional hasta el último minuto, ya que son conscientes de que los estatutos del PP valenciano dan a la presidencia del partido un poder plenipotenciario. Por eso, Ripoll, hombre de confianza de Zaplana e interlocutor de los afines al ahora portavoz en el Congreso, lanzó al mediodía de ayer en Valencia una severa advertencia: "No renunciamos a nada". Una afirmación destinada a lograr garantías de que una vez sea proclamado Camps como presidente del PP valenciano no serán barridos de los puestos de poder.

Los partidarios del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, aseguraron que en las conversaciones sólo se ha hablado de los cambios en la dirección del PP, fundamentalmente del relevo al frente de la presidencia y la secretaría general del PP de la Comunidad Valenciana y de la posibilidad de reordenar algunas funciones del Comité Ejecutivo Regional. El Gobierno que preside Camps ha quedado al margen de las negociaciones, según los partidarios del presidente, que ha dejado claro que las competencias son exclusivamente suyas e innegociables.

El principio de acuerdo, que no estaba completamente cerrado en la noche de ayer, se logró después de que el domingo los interlocutores de uno y otro sector -Ripoll y Castellano por los zaplanistas, y el consejero de Economía, Gerardo Camps, y el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, por los campistas- se reuniesen a cenar en Valencia sin llegar a ningún tipo de pacto.

La tensión entre uno y otro sector se tradujo en la amenaza de tener que retrasar nuevamente el relevo de Eduardo Zaplana, que presentó su dimisión el pasado 13 de abril para dedicarse plenamente a su cargo de portavoz en el Congreso. Así, durante la mañana se quisieron hacer evidentes las dificultades de agenda para convocar a la Junta Directiva Regional del PP. En este contexto se esgrimió la presencia en Valencia de un miembro de la Casa Real y la convocatoria de pleno de las Cortes Valencianas el miércoles por la tarde, y el desplazamiento a Madrid de Francisco Camps el jueves para entrevistarse con la ministra de Medio Ambiente.

Sin embargo, el secretario general adjunto del PP nacional, Ángel Acebes, fue taxativo al ser interpelado por la crisis del PP valenciano: "Esa junta directiva se va a celebrar y se va a celebrar pronto. Y podrán comprobar entonces la unidad del PP en Valencia". Acebes insistió en que los populares valencianos son "un partido unido y lo demostrarán en esa junta directiva como lo llevan demostrando tantos años".