La final española es posible

Miércoles 26 de mayo. Estadio Arena AufSchalke, de Gelsenkirchen (Alemania). Final de la Liga de Campeones: Real Madrid-Deportivo. El sorteo de los cuartos de final de la máxima competición europea, celebrado ayer en Nyón (Suiza), ha abierto la posiblidad de que los dos supervivientes españoles se disputen el título. El Madrid y el Depor, caminando por vías distintas, no se encontrarían hasta el último partido.

Máximo favorito en las apuestas, que se pagan 5 a 2, el Madrid se cruzará primero con el Mónaco, un rival inédito y asequible, y, en caso de éxito, le aguardará luego el ganador del derby londinense, Arsenal-Chelsea, en una ronda más compleja y con el encuentro de vuelta también fuera. Al Depor, en cambio, le espera de entrada uno de los peores adversarios, el Milan, vigente campeón y líder italiano, mientras que en las semifinales jugaría contra el vencedor del Oporto-Lyón, dos conjuntos de menor entidad en principio.

"Jugamos primero en casa y no nos podemos descuidar", coinciden en afirmar, en representación del Madrid, tanto su entrenador, Carlos Queiroz, como el director deportivo, Emilio Butragueño; "recuerden que el Mónaco, líder de su Liga, le marcó ocho goles al Depor. La eliminatoria está al 50%". El regreso al estadio Bernabéu de Morientes, que suma ocho goles en el campeonato francés y cinco en el europeo, pondrá un poco de picante al enfrentamiento.

Eliminada la Juve, el Depor se encontrará con el Milan, otro rival conocido, puesto que se han enfrentado tres veces en cuatro temporadas. El equipo gallego le tiene ganas a un adversario con el que no ha podido en Riazor mientras que de San Siro ha salido con el triunfo o el empate. "Prepárense para disfrutar de la eliminatoria estrella", sentencia Augusto César Leondoiro, su presidente. En Milan se felicitan por eludir al Madrid y atisbar una semifinal teóricamente más sencilla, aun cuando su victoria sobre el Manchester da cierto poderío al Oporto.

La otra eliminatoria estrella será la del Arsenal, líder de la Premier League, y un Chelsea en precario y con sus dos porteros, Sullivan y Cudicini, que ayer se fracturó la mano derecha, lesionados.