Demanda de los herederos de Harrison

La viuda de George Harrison, Olivia Arias, y su hijo Dhani han denunciado al doctor Gil Lederman, el oncólogo neoyorquino que trató al músico. La familia ya se había quejado de que Lederman, conocido en los círculos médicos por su tendencia a la autopromoción, había concedido entrevistas sobre los últimos días de Harrison, en contra de los deseos explícitos de la familía, algo por lo que el Departamento de Salud de Nueva York le impuso una multa. Poco después, Olivia y Dhani se enteraron de que Lederman aprovechó que, quince días antes del fallecimiento, ellos estaban ausentes para introducir en la habitación de Harrison a sus tres hijos, forzando al ex Beatle a que firmara en la guitarra de su hijo y que dedicara autógrafos a sus dos hijas. Los Harrison creen que Lederman pretende especular con la guitarra -ya ha publicado fotografías con el instrumento- y quieren hacerse cargo de ella, cambiándosela por una guitarra nueva, aparte de solicitar 10 millones de dólares por daños y perjuicios. Lederman, que ha dejado su cargo aunque sigue ejerciendo en el hospital, insiste en que el guitarrista estaba lúcido y que no tuvo que convencerle para que firmara esos recuerdos, aunque una enfermera presente parece opinar lo contrario.-