El Mediterráneo como decorado

Tano visitará mañana por primera vez el que será su hogar durante buena parte de 2004. Tano es un burro que se ajusta a la perfección a la descripción que hizo Juan Ramón Jiménez de su pollino Platero. Su nueva casa en realidad es un carguero vikingo con bandera antillana (de la isla de San Vicente) rebautizado como Naumon y transformado por La Fura dels Baus en un "espacio cultural nómada de intercambio y creación". El grupo de teatro catalán zarpa hoy desde Barcelona en una aventura que le llevará por casi todos los mares del planeta durante los próximos cuatro años. Diana Garrigosa, esposa del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, amadrinará la salida.

Su primer destino es Génova, donde ofrecerán el 31 de diciembre el acto inaugural de la Capital Europea de la Cultura. Tras este espectáculo seguirá todo un recorrido en el que participan los 50 navegantes que componen la tripulación -como los argonautas- por los principales puertos del mundo llevando espectáculos fureros. Los integrantes de la compañía esperan aprender "las 1.000 tonalidades del mundo", aseguró ayer Carlos Padrissa, uno de los seis directores artísticos de La Fura.

La compañía utilizará el barco como sede de su 'Tetralogía anfibia', con textos de Rafael Argullol

Padrissa no ocultaba sus nervios, paseaba por la cubierta, la bodega o el puesto de mando del Naumon intentando explicar en qué consistía el proyecto que se inicia hoy. La labor no era fácil teniendo en cuenta que La Fura quiere hacer de este barco un espacio en el que quepa casi de todo. Mientras, el artista Pau Nubiola pintaba en caracteres negros sobre la quilla naranja del buque la palabra Naumon en los alfabetos latino, árabe e hindi. Otros operarios instalaban como mascarón de proa un inmenso zepelín y el capitán, Vicenç Tomàs, mostraba los cambios obligados en la ruta que les llevará hasta Génova por culpa del temporal que azota esta zona del Mediterráneo.

El Naumon -palabra que surge de la contracción de los términos nave y mundo en catalán- ya casi no recuerda en nada al barco carguero de minerales noruego construido en 1964 con 60 metros de eslora, 1.100 toneladas de peso y 3,5 metros de calado. Los astilleros de Vigo han trabajado en los últimos meses en la nave para transformarla en un gran espacio para la cultura con una cubierta que se usará como escenario y una bodega de 325 metros cuadrados que sirve como teatro y sala de exposiciones. Aún queda pendiente una segunda transformación del navío que se realizará en los próximos meses.

La Fura utilizará el barco como sede de su Tetralogía anfibia con la que celebrará a partir del próximo año su 25º aniversario. El primer espectáculo se ofrecerá en el Fòrum 2004 y también en Atenas durante los Juegos Olímpicos. Rafael Argullol, que ya colaboró con la compañía en su versión de La flauta mágica, es el autor de los textos de estas cuatro obras dedicadas a la creación (se presentará en la costa mediterránea durante 2004), las migraciones (la gira será en 2005 por América), la memoria (en Asia durante 2006) y la divinidad (en África durante 2007). Cada obra tendrá tres versiones: una para representar en tierra (Terramaquia), otra en la cubierta y el mar (Naumaquia) y la tercera, más íntima, se celebrará en la bodega (Matria).

Nadie puede saber si Tano tendrá hoy la misma ilusión que el resto de los componentes de la compañía al embarcar en este carguero. La Fura ha hecho de este animal la mascota del primer espectáculo, "porque el burro se encuentra en peligro de extinción y durante miles de años ha sido el sustento de las pequeñas economías de todo el Mediterráneo. Pero que nadie se preocupe, a Tano lo trataremos como un rey", dijo Padrissa.