El fiscal pide 10 años de prisión para el ex juez Pascual Estevill

Diez años de cárcel y otros 21 de suspensión. Ésa es la petición que ha formulado la fiscalía contra el ex juez de Barcelona Lluís Pascual Estevill, al que se imputan los delitos de cohecho, detención ilegal, alzamiento de bienes, amenazas y tres más de prevaricación. La fiscalía también le reclama 270.000 euros de responsabilidad civil y que el Estado asuma el pago de esta cantidad de manera subsidiaria.

El escrito de acusación está firmado por el fiscal Carlos Ramos, ex delegado de la fiscalía anticorrupción en Barcelona, y se dirige también contra otras nueve personas que supuestamente colaboraron en las extorsiones a empresarios implicados en los procesos judiciales que investigaba Estevill como juez en Terrassa y Barcelona entre 1990 y 1994 y a los que se les exigió dinero para no encarcelarlos o dejarlos en libertad. Entre los acusados por la fiscalía figura el abogado Joan Piqué Vidal, que fue defensor de Jordi Pujol en el caso Banca Catalana, y para quien solicita seis años de cárcel y 15 de suspensión por delitos similares. Estevill y Piqué Vidal declinaron ayer, a preguntas de EL PAIS, realizar cualquier comentario sobre el escrito del fiscal .

El juicio podría celebrarse el próximo mes de enero y corresponde al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que anteayer abrió juicio oral contra los acusados después de casi ocho años de investigación. La fiscalía solicita la declaración de 43 testigos, entre ellos el ex consejero de Economía de la Generalitat Macià Alavedra y el ex presidente del Banco Central Alfonso Escámez. Durante la instrucción de la causa se investigó la cena celebrada en casa de Alavedra a finales de 1993, en presencia de Estevill y Piqué Vidal, y a la que asistieron también José María Amusátegui, entonces presidente del Banco Central, y Luis Magaña, presidente de Fecsa y ya fallecido.

Pago de la caja de Fecsa

La cena se produjo la víspera de la declaración ante Estevill como inculpados de varios directivos del Banco Vitalicio y de la aseguradora La Estrella, así como del propio Escámez. El escrito de acusación de la fiscalía no alude a la cena en casa de Alavedra, pero sí relata que "en defensa de los intereses de Alfonso Escámez y sin que éste estuviera enterado, para prevenir que fuera dictada en su contra una resolución de prisión", Luis Magaña "permitió u ordenó la extracción de la caja de Fecsa" de 115 millones de pesetas, que se repartieron. Esta cantidad, más otros 31 millones de pesetas que habían pagado otros empresarios extorsionados, según el relato del fiscal, se la repartieron Piqué Vidal, el también abogado inculpado Joan Vives Rodríguez de Hinojosa y Estevill, a quien le correspondieron 50 millones de pesetas. El dinero fue repuesto después por Magaña, precisa la fiscalía.

Estevill, que también llegó a ser vocal del Consejo General del Poder Judicial a propuesta de CiU, ya fue condenado en 1996 por el Tribunal Supremo a seis años de suspensión por prevaricación y en 2001 a otros años siete de prisión por delito fiscal, una pena que ya ha liquidado. El ex juez tiene 69 años, pasó 22 meses en prisión provisional por la causa que tiene pendiente y ahora está en libertad bajo fianza de 601.000 euros. Piqué Vidal, de 70 años, también pagó 450.759 euros para eludir la cárcel.

Entre las personas que acusa la fiscalía se incluye también el joyero de Barcelona Rogelio Roca y Javier Pascual Franquesa, hijo del ex magistrado. El fiscal pide para éste un año de cárcel por un delito de alzamiento de bienes, cometido después de la condena del Tribunal Supremo contra su padre para evitar el embargo de las propiedades de Estevill. También por supuesto alzamiento de bienes estuvieron inculpadas Núria Franquesa y María Dolores Trujillo, esposa y nuera de Estevill, aunque finalmente han quedado sólo como responsables civiles a título lucrativo.