La Junta califica a Rajoy de "nuevo pilar de la política de desprecio" del PP

El Gobierno andaluz "no tiene ninguna esperanza" de que la designación de Mariano Rajoy como nuevo líder del PP "cambie ni un ápice el comportamiento" del Ejecutivo central con la Junta de Andalucía. De manera nada improvisada, el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, se mostró ayer convencido de que el todavía vicepresidente primero será "el nuevo pilar" de la "política de desprecio" que, en su opinión, practica el PP y el Gobierno central hacia Andalucía y destacó las "experiencias amargas" vividas por la Junta cuando Rajoy ocupaba el ministerio de Administraciones Públicas.

En concreto, Zarrías recordó, aunque no con mucha precisión, cuando Rajoy llamó "gamberro" al presidente de la Junta de Andalucía por subir las pensiones no contributivas. En realidad, el sucesor de Aznar acusó de "gamberrismo institucional" a la Junta tras anunciar un recurso al Tribunal Constitucional de los Presupuestos del Estado por la financiación autonómica. El consejero también desempolvó la gran bronca en la que se convirtió una comisión mixta Estado-Junta de enero de 1997, que provocó que el Gobierno andaluz reclamara las cintas grabadas de la reunión.

Zarrías dijo que desconoce "alguna preocupación" de Mariano Rajoy por Andalucía en sus ocho años como ministro y que la "confianza del dedo de Aznar" deberá revalidarla en las urnas.