Recogida de firmas contra un centro de menores en Collado

Una plataforma de vecinos de Collado Mediano ha emprendido una serie de movilizaciones, la primera la semana pasada y la última de ellas esta misma tarde, para protestar por la apertura de un centro de menores en su municipio. Varios centenares de personas se concentraron ayer en la plaza del pueblo para protestar y recoger firmas contra un centro del que aún se desconoce qué tipo de jóvenes albergará.

Los residentes aseguran que lo que se va a poner en marcha es un correccional "de alta seguridad", es decir, un reformatorio para chavales autores de delitos graves. Pero portavoces de la Consejería de Servicios Sociales reconocen que en la finca van a montar un centro de atención para menores. "Pero no sabemos todavía de qué tipo; eso sí, seguro que no será un reformatorio de alta seguridad", añaden. El consejero de Servicios Sociales en funciones, José María Alonso Seco, se entrevistará el lunes con el alcalde de Collado Mediano para tratar el tema. Mientras, las obras permanecerán paradas.

En principio, el reformatorio de alta seguridad de la región, con 50 plazas ampliables a 100, está previsto que se construya en Valdemoro, en unos terrenos municipales cercanos a la cárcel. Estará destinado a los menores autores de delitos graves con mayor conflictividad.

La finca adquirida por Servicios Sociales en Collado Mediano, conocida como Los Tilos, está situada en el número 2 de la calle de Ramiro de ese municipio. Lo que alarma a los vecinos es que "haya sido rodeada por una doble valla y se hayan instalado focos de iluminación". "Se trata de un edificio antiguo que, por muchas reformas que realicen en él, nunca cumplirá los requisitos para ubicar en él un centro de alta seguridad", afirman los residentes.

"El pueblo carece de médico y de servicio de policía las 24 horas del día; tampoco tiene escuela infantil ni residencia de mayores. La Comunidad nunca se ha acordado de favorecer al pueblo sin antes tener que implorar, pero sí sabe que existimos para adjudicarnos este servicio tan innecesario para nosotros y que ha creado tanta alarma", argumentan los convocantes de las protestas.

En Madrid hay ocho reformatorios con 151 plazas. Dos de ellos son semiabiertos, los de Altamira (San Blas) y Peñalara (Carabanchel) y el resto cerrados: Guadarrama; El Madroño, Renasco y Los Rosales (Carabanchel); El Pinar (Fuencarral) y Los Álamos, en Chinchón.