El camino a la inversa

Este cuarteto presentaba su segundo disco, Un mundo feliz, en el que han colaborado Tomasito, Santiago Auserón y Lichis; y lo hacía evidenciando que su desarrollo va haciendo el camino a la inversa de como suele ser habitual. Su primer disco sufrió la desorientación de una compañía multinacional y se han pasado a la independencia discográfica. Su sonido comenzó siendo profundamente heredero de las bandas mestizas de elenco numeroso, y ahora han optado por restringir su formación y un sonido en el que pesa tanto la raíz caribeña como la dureza de una guitarra eléctrica de sabor metálico.

La Guerrilla Gorila de 2003 se defiende con canciones llenas de latinidad, con letras imbuidas de carga social y un vaivén rítmico al que su cantante, Kike, saca buen partido, aportando su forma de rapear y su manera de cantar tremendamente personal. Niños, Ala delta o Déjalo tumbao fueron algunas de las nuevas composiciones que en directo se apreciaron como más rotundas, aunque es de prever que el grupo siga una evolución lógica hacia terrenos musicales más urbanos y menos tintados de jungla latinoamericana.