Garzón encarcela a otros 5 dirigentes de Udalbiltza por su vinculación a ETA

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón acordó ayer el ingreso en prisión de cinco dirigentes de Udalbiltza Kursaal por considerar que forman parte de ETA.

Se trata del presidente de Udalbiltza Kursaal y alcalde de Ondarroa (Vizcaya), Loren Arkotxa; de la concejal de Urretxu (Guipúzcoa) Miren Josu Aramburu Etxeberria y el concejal de Lezo (Guipúzcoa)Imanol Esnaola, todos ellos integrados en Batasuna; de Xabier Alegría, procesado por Garzón y en prisión preventiva por presunta pertenencia a ETA a través de Ekin, y de Joseba Mikel Garmendia Albarracin, acusado de ser dirigente de Ekin y de gestionar el entramado financiero de ETA por medio de la empresa Banaka. Garmendia, que ya estaba en prisión preventiva, es el profesor titular de Economía Aplicada en la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del País Vasco que recientemente tomó posesión de su cargo en el juzgado de Garzón.

El juez considera que los cinco han podido incurrir en un delito de "asociación ilícita en su modalidad de organización terrorista, de los artículos 515.2 del Código Penal, y de otro delito de integración en banda terrorista" previstos en el artículo citado y en el 516.2 del mismo cuerpo legal.

Complejo terrorista

Aunque el fiscal había solicitado el ingreso en prisión de los seis imputados que declararon ayer, el magistrado ha dejado en libertad bajo fianza de 50.000 euros al alcalde de Oiartzun (Guipúzcoa), Xabier Iragorri Gamio. El juez considera que su responsabilidad, al estar vinculado con Udalbiltza Patzuergo Konsorzio, aunque importante, es menor que la de los otros cinco, ya que no está acreditado que tuviera capacidad de decisión sobre Udalbiltza Kursaal.

El auto del juez señala que Loren Arkotxa tiene la responsabilidad máxima en la estructura de Udalbiltza Kursaal, integrada en el armazón del complejo terrorista dirigido por ETA-Ekin. Alegría y Garmendia se encuentran imputados en otros procesos penales por acciones similares a las de Arkotxa en el seno de la organización ETA-Ekin.

La labor de Alegria, coordinadora de diversas áreas de Udalbiltza, fue continuada por Miren Josu Aramburu y por Imanol Esnaola.

El juez precisa que respecto a las actividades de financiación, de las que era responsable Joseba Mikel Garmendia, los hechos pueden constituir un delito de malversación de caudales públicos, ya que, de los indicios existentes en la causa se desprende que "se habría dispuesto de cantidades de dinero pertenecientes a ayuntamientos del País Vasco y Navarra controlados por HB-EH-Batasuna-Sozialista abertzaleak, para una finalidad claramente ilícita cual es la financiación de una organización terrorista y sus proyectos. La malversación aparece en este caso vinculada a colaboración con ETA.