Aznar y Borrell se enfrentan por el papel de España en la cumbre de Cardiff

El presidente del Gobierno, José María Aznar, y el candidato socialista, José Borrell, mantuvieron ayer un tenso debate en el Congreso sobre la posición española en el seno de la Unión Europea (UE) tras la cumbre celebrada en Cardiff. Era la primera vez que Aznar y Borrell cruzaban argumentos en sede parlamentaria tras el debate sobre el estado de la nación, celebrado el pasado mes de mayo. Borrell acusó a Aznar de jugar un «papel paupérrimo» en Europa, que estaría «a la altura de la decepción» que, en su opinión, ha representado la cumbre de Cardiff. José María Aznar negó que la cumbre tuviese otros propósitos que los que finalmente se han conseguido y tachó de catastrofista la posición mantenida por el candidato socialista, aunque cuidando en todo momento de no citar por su nombre ni una sola vez a Borrell ni al Grupo Socialista. Según Aznar, la cumbre ha supuesto un paso adelante en cómo lograr a escala europea crecimiento y empleo. Según el candidato socialista, «la posición de España es ahora más débil que hace unos meses». Su conclusión es que en el seno de la Unión Europea «parece que se ha forjado un eje franco-alemán, con el asentimiento tácito británico, para limitar el proceso de construcción europea a la unión monetaria». Aznar insistió a lo largo de su intervención en ofrecer diálogo a la oposición para reforzar la posición española a favor de los fondos de cohesión. Borrell aseguró, en ese sentido, que podía defender la construcción política europea «sabiendo que tiene segura la retaguardia» porque los socialistas, dijo, «no le acuchillaremos por la espalda, como hizo usted cuando un Gobierno de España, socialista, peleaba en Edimburgo para conseguir los fondos de cohesión».