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COPAS Y BASTOS
Columna
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Nuevas librerías

El pasado 13 de febrero cayó en jueves. Por la mañana, a eso de las 12.30, pasé por el quiosco de Les Punxes a comprar la prensa extranjera y luego me fui a leerla a la terraza del Bauma. La camarera me sirvió el Jameson y me entregó un sobre: "Han dejado esto para usted", me dijo. Estoy acostumbrado a que me dejen cosas en el Bauma: cartas, libros, alguna que otra botella, alguna que otra caja de habanos... Esta vez era una invitación: "Con motivo del centenario de Georges Simenon, el próximo jueves, 13 de febrero del 2003, de 4 a 8 de la tarde, Negra y Criminal les invita a pasar por la librería y celebrarlo con nosotros. Podemos brindar por el autor y su obra con un vino francés o un calvados". Y escrito a mano: "Ens encantaría que pugués passar".

Efectivamente, el jueves 13 de febrero era el día del nacimiento de Simenon, del cual se cumplían aquel jueves 100 años. Sabía de la existencia, desde el mes de diciembre del pasado año, de la librería Negra y Criminal, la primera de España especializada en novela negra, según leí en la revista Nova Ciutat Vella, una librería situada en la Barceloneta, en la calle de la Sal, número 5. Y allí fui, alrededor de las 18.30.

Cogí el metro de Verdaguer, bajé en Barceloneta, anduve por el paseo de Joan de Borbó, me metí en la calle de Ginebra y en un santiamén di con la calle de la Sal y con la librería. Iba fumando un cigarro, como tengo por costumbre, y antes de entrar en la librería hice, instintivamente, el gesto de apagarlo contra la pared y lanzarlo en una bolsa de basura (cuando la hay). El cigarro en cuestión era un toscano, medio toscano extra vecchio, que había encendido al salir del metro. Pues bien, nada más entrar en la librería me encontré con una foto de Humphrey Bogart, un Bogie fumando un cigarrillo, con la siguiente frase: "Queda totalmente permitido fumar". Así que encendí la otra mitad del toscano. La librería es chica, pero está muy bien surtida. Me ofrecieron un calvados -Père Magloire- que gentilmente rechacé. "Si quiere le podemos ofrecer un whisky", me dijeron. Me mostraron los simenones. Había un buen lote de la serie Maigret, de Tusquets (esos mismos maigrets que la semana pasada estuve buscando, sin fortuna, en Barajas) y algunos viejos ejemplares de Caralt y de Aymà. La señora Montse Clavé -que es quien me dejó la invitación en el Bauma-, la propietaria, con Paco Camarasa, de la librería, es la mar de simpática. Tiene un montón de ideas en la cabeza, algunas de las cuales ya las ha puesto en práctica. "El otro día reunimos a unas setenta personas ante el televisor viendo...", porque en Negra y Criminal tienen un televisor en el que pasan cine negro en blanco y negro (aunque el filme sea en color, se ve forzosamente en blanco y negro). La tarde del jueves 13 de febrero pasaban Police Python 357 , una película de Alain Corneau con Ives Montand y una Simone Signoret shakespeariana y paralítica. Nada del otro mundo.

En Negra y Criminal, la mayoría de los libros son en castellano y catalán, ediciones recientes, aunque también pueden encontrarse algunos pocos ejemplares de segunda mano, pero las ediciones originales, en inglés (o en norteamericano) y francés, más bien escasean. Donde sí se pueden hallar ejemplares de novela negra, de polars en francés, es el Le Bouquiniste (de Barcelona). Esta librería, de libros franceses de ocasión, se halla situada en el número 458 de la calle de Aragó, esquina con Lepant (abierta de martes a sábado). "Plus de 10.000 livres d'ocasion d'expresion française". Eso es lo que anuncian . Y a fe mía que está muy bien surtida (en novela, en poesía, en teatro, en polars y sobre todo en libros para críos). Me compro (por solo tres euros) una edición de Coup de lune, un roman de Simenon, prácticamente nuevo, con ilustraciones de Marcele Crépy, ejemplar numerado, editado por el Club des Amis du Livre, (París, 1961). La señora que está al frente del negocio me dice que una vez al mes viaja a Lyón para renovar existencias. Además de libros de ocasión, la señora se plantea abrir una sección de libros viejos, ediciones de arte, evidentemente mucho más caros.

Les deseo mucha suerte. Tanto a Le Bouquiniste de Barcelona como a la Negra y Criminal de la Barceloneta. Cierran librerías (Cinc d'Oros, la Francesa), pero se abren otras. Público lo hay. Y más para este tipo de librerías, en las que el libro está muy próximo, creando una intimidad entre libro y lector, y bien servido, por gentes que quieren a esos libros, que conocen a sus autores, que conocen sus historias, que saben venderlos.

P. S. Desde hace un par de semanas Le Nouvel Observateur dedica una columna al centenario de Simenon. Una buena columna. Entre las novedades que han aparecido con motivo del centenario del escritor belga, hay que destacar Simenon Cinéma (Editions Textuel), de Serge Toubiana y Michel Schepens, donde los simenonianos pueden encontrar los carteles originales de todas las adaptaciones cinematográficas que se han hecho de las novelas de Simenon. Es un libro regalo, que entra por los ojos. Sale por unos 60 euros y lo tienen (lo compré) en Laie. Philippe Reliquet, director del Institut Française de Barcelona, me hace saber que está preparando, con el Consulado belga, una retrospectiva de las mejores películas que se rodaron en Francia sobre la obra de Simenon. Y seguro que habrá más cosas. Seguiremos informando.

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