Giro ético en la filosofía
A lo largo del siglo XX, la ética ha ido adquiriendo una mayor relevancia tanto en el ámbito más restringido y especializado de la filosofía académica como fuera de ella. Incluso me atrevo a decir que lo que, en otros momentos, no fue más que un apéndice secundario en la obra de los distintos filósofos, hoy es el motivo básico de la filosofía. Las razones que explican ese giro ético del pensar filosófico son muchas y distintas, y es imposible recorrerlas ahora, aunque sin duda una de ellas la constituye la creciente inquietud social ante problemas que nos fuerzan a buscar soluciones y a encontrar una justificación aceptable para ellas. Cuanto mayor es nuestra libertad y mayores son las posibilidades de escoger que se nos ofrecen, más necesitamos un agarradero desde el que dar respuestas razonadas y razonables. Dicho recurso, el único que nos queda, no es otro que el de los derechos humanos, los valores últimos, los principios fundamentales. Es decir, el recurso de la ética.
DOCE TEXTOS FUNDAMENTALES DE LA ÉTICA DEL SIGLO XX
Carlos Gómez (editor) Alianza. Madrid, 2002 307 páginas. 7,84 euros
El pensamiento ético tiene una historia tan larga como la filosofía misma, si bien cada época expresa preocupaciones propias y las formula a su manera. Lo peculiar en el pensamiento moral del siglo XX es el intento de articular una teoría moral totalmente desprovista de sus anteriores fundamentos teológicos, naturales o incluso puramente racionales. Es difícil sistematizar una época que, sobre todo, reacciona contra el pensar seguro de sí mismo que culmina con la Ilustración, y se diversifica en trayectorias muy divergentes: el análisis del lenguaje, la fenomenología, el existencialismo, los marxismos, la posmodernidad. Ante esa dispersión, ofrecer una antología de textos básicos, bien articulados en una introducción magistral, como hace Carlos Gómez, es un trabajo meritorio, esclarecedor y nada fácil. Ordena nuestro pasado ético más inmediato y presenta los rasgos más sobresalientes de los que aún siguen siendo los problemas básicos de la filosofía moral, en un libro que puede ser una excelente herramienta tanto para el profesor como para el estudiante, para el especialista y el profano en la materia, pues si es cierto que algunos textos son más duros que otros, todos ellos tratan de habérselas con las preguntas más universales del pensamiento moral: ¿qué debemos hacer?, ¿dónde hallar nuestras normas básicas?, ¿cómo resolver los conflictos más fundamentales?
Los dos últimos textos de la antología responden al escueto epígrafe: "Ética en lengua española", lo que pudiera llevar a entender que nuestra filosofía no tiene cabida en las tendencias filosóficas del siglo XX que agrupan al resto de los filósofos. Afortunadamente ya no es así. Lo que el epígrafe quiere mostrar es el esfuerzo de José Luis Aranguren por construir un discurso contra el escolasticismo ortodoxo dominante, y el de Javier Muguerza por impulsar y consolidar el desarrollo del pensamiento ético en España y en América Latina. Gracias a ese esfuerzo, nuestra filosofía moral ya no es sólo una "ética en lengua española", sino que se encuentra plenamente integrada en el pensamiento moral de nuestro tiempo.
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