_
_
_
_
Reportaje:SAFIYA HUSSAINI | SOCIEDAD

Todos con Safiya

El 25 de marzo de 2002 puso fin a la pesadilla que llevaba viviendo la nigeriana de 35 años Safiya Hussaini desde hacía seis meses. Ese día, un tribunal islámico de Sokoto (norte de Nigeria) se retractó, aceptó el recurso de sus abogados y desestimó la condena a muerte por lapidación que le había impuesto por delito de adulterio. En la vista condenatoria, el tribunal había aplicado una interpretación penal de la sharía (ley islámica basada en el Corán), un procedimiento que se utiliza desde hace dos años en los 11 Estados de mayoría musulmana del norte.

El caso Safiya se significa por ser el primero en que una mujer se libra de morir lapidada gracias a la mediación internacional, en este caso, promovida por las ONG que, lideradas por Amnistía Internacional (AI), consiguieron cientos de miles de firmas para su absolución a través de Internet. Los medios de comunicación y los Gobiernos europeos apoyaron la iniciativa.

El mismo día que fue absuelta Safiya, su compatriota Amina Lawal, de 30 años, era condenada a la misma pena, también por adulterio
El 'caso Safiya' se significa por ser el primero en que una mujer se libra de morir lapidada gracias a la mediación internacional; en este caso, promovida por las ONG
Más información
Un tribunal de apelación de Nigeria absuelve a Amina Lawal de adulterio

Pero el mismo día que fue absuelta Safiya, en el Estado de Katsina, su compatriota Amina Lawal, de 30 años, era condenada a la misma pena, también por adulterio. Después de varios aplazamientos, Amina sigue pendiente de ser liberada. La movilización internacional en defensa de su vida se mantiene en el mismo tono que con la campaña en favor de Safiya. Incluso se ha añadido la solidaridad de una decena de mujeres que se negaron en noviembre pasado a participar en el concurso Miss Mundo en la capital nigeriana, Abuja.

Las revueltas fundamentalistas contra el certamen por considerarlo pecaminoso causaron 200 muertos y provocaron que éste se trasladara a Londres. El vigor fundamentalista en el norte de Nigeria, que se aplica en castigar con la muerte actos que en los otros 25 Estados del país de mayoría cristiana no pueden ser condenados por su respeto a la Constitución laica, y el retraso de los tribunales en resolver la absolución de Amina están haciendo que cunda el pesimismo sobre su suerte.

AI ha respondido a esta postergación intensificando la campaña. La aplicación penal de la sharía no es privativa de Nigeria. Sudán, Arabia Saudí, Irán, Yemen, Kuwait, Afganistán y Pakistán padecen del rigor de esta ley que discrimina en especial a la mujer, ya que los tribunales les exigen más pruebas para justificar su inocencia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_