Bryan Ferry presenta mañana en el Kursaal su último disco

Pasado el revuelo del último Zinemaldia, la música retomará mañana su acostumbrado lugar de preferencia en la oferta cultural de San Sebastián. Lo hará con la presencia de Bryan Ferry en el auditorio del Kursaal (21.00), donde el cantante, músico y compositor inglés, quien fuese el motor principal de Roxy Music, presentará las canciones de su 14º trabajo en solitario.

Frantic es el título de un disco sobrio de pop y rock en cuya grabación participaron colegas como Dave Stewart, Brian Eno y Johnny Greenwood, guitarrista de sus compatriotas Radiohead. Entre sus canciones se cuelan It's all over now, baby blue y Don't think twice, it's all right, un par de adaptaciones de su admirado Bob Dylan. 'Siempre busco canciones con letras interesantes, y él es maestro de letristas', asegura Ferry, un artista que se caracteriza por interpretar con frialdad las más diversas emociones.

'Siempre me atrajo la música emocional. El blues fue lo primero que escuché, Leadbelly me impresionó, era fantástico. Sólo tenía diez años y fue el principio de la aventura del descubrimiento de todos aquellos artistas. Escuchaba a músicos de blues y jazz, como Charlie Parker, y cantantes como Billie Holiday. Siempre música con un toque trágico, que te hacía llorar, la música que más me gusta. Recibes una serie de influencias y de éstas surge tu estilo', afirma el músico justificando su modo de ejecutar los temas y destapando buena parte de sus influencias básicas.

Los promotores de su actual gira señalan que el repertorio presta 'especial atención a los grandes éxitos que dieron a Roxy Music su mítico estatus'. Así, el pop sofisticado que dio a conocer a Bryan Ferry en el mundo del espectáculo también tendrá un espacio de privilegio en el concierto de la capital guipuzcoana, para solaz de nostálgicos y de sus más seguidores más veteranos. Estos acérrimos se felicitarán, a buen seguro, porque la banda de acompañamiento incluya, entre sus más de diez componentes, al guitarrista rockero Chris Spedding y a Paul Thompson, batería de Roxy Music, grupo que se separó en 1983.