Martínez culpa al gobierno de la Junta de fabricar la imagen que identifica al PP 'con el peor pasado'

Teófila Martínez no se concedió tregua e inició su campaña como candidata a la Junta en el discurso de presentación de su candidatura a la presidencia del PP. Martínez dijo que la imagen reaccionaria que ha arrastrado su partido desde hace veinte años ha sido 'malintencionada' y señaló a los culpables, 'los miembros del Consejo de Gobierno que preside el señor Chaves y, no pocas veces, el propio Chaves'. Su primera promesa electoral si llega a presidir la Junta fue más bien una amenaza: 'Si soy presidenta, os aseguro que a más de uno se le va a acabar el cuento'.

Una Teófila Martínez pletórica y emocionada, escoltada a lo largo del congreso por varios ministros, entre ellos Rodrigo Rato, convirtió su discurso de presentación de la candidatura a la presidencia del PP andaluz en una proclama propia de la aspirante a presidir la Junta de Andalucía. Martínez puso especial empeño en limpiar la imagen 'injusta y maléfica' con que el PSOE ha lastrado a los militantes de su partido desde hace veinte años.

A lo largo de dos décadas, dijo, 'se nos ha identificado malintencionadamente con el peor pasado cuando aquí todos tienen pasado y el de algunos está entre los peores del siglo XX'. 'Hay un partido político, el Partido Socialista que, continuando la tradición de donde proceden, se cree en posesión de la única verdad histórica posible', precisó. 'Creer que uno mismo es moral y políticamente superior por ser socialista es intelectualmente ridículo y, después de ver lo que se ha visto en España y en Andalucía, es sencillamente, y desde los hechos, completamente falso'.

Los veinte años de gobierno ininterrumpido del PSOE han creado 'un búnker de personas que llevan veinte años en el machito y que le tienen pánico al cambio'. A ellos dirigió Martínez su primera promesa electoral como candidata a ocupar el puesto de Manuel Chaves, una promesa que en realidad encubría una amenaza. 'Es bueno que los que se han acostumbrado a vivir de lo público y del público le tengan respeto al cambio que se avecina porque si un día soy presidenta de la Junta os aseguro que a más de uno se le va a acabar el cuento', advirtió.

'Queremos emprender una profunda regeneración democrática después de veinte años acostumbrados a una altanera y prepotente exhibición de mando con un escaso respeto a los adversarios por parte del Partido Socialista [...]. Necesitamos una Andalucía donde el único carné obligatorio para trabajar, para crear, para emprender, para aportar y tener derechos sea el carné de identidad y ningún otro'.

Antes de entrar en el discurso electoral, Teófila Martínez tuvo unas palabras de ánimo para los afiliados que han pasado la prueba de permanecer cuatro lustros en la oposición. 'Dicen que el gobierno desgasta, pero todos sabemos que lo que de verdad desgasta es la oposición. Un gobierno siempre puede hacer cosas aunque las haga mal. La oposición sólo puede hacer preguntas', se lamentó.

Con todo, añadió, 'nuestros militantes y afiliados que llevan tantos años en la oposición no sólo no se han desgastado sino que además de resistir -y ya sabéis que Camilo José Cela puso como lema de su fundación que 'el que resiste gana'- se han rearmado de entusiasmo'.

Proyecto tecnológico

A continuación Martínez comparó las consecuciones del PP en el Gobierno de la nación con la actitud renuente mostrada por Manuel Chaves. A título de ejemplo contrastó el proyecto del Gobierno de pelear en Europa por traer Andalucía 'el mayor proyecto tecnológico y aeroespacial que puede crear alrededor de 10.000 empleos con el cierre por parte de la Junta de la única empresa de este sector radicada en la comunidad.

Teófila Martínez se refirió indirectamente a las disidencias y enfrentamientos que han diezmado o dividido el PP en provincias como Huelva y Córdoba en donde han surgido plataformas compuestas por antiguos militantes. Martínez aseguró que del proyecto de renovación puesto en pie por el PP sólo quedan fuera 'aquellos que se excluyen porque creen que son más importantes que el proyecto político del partido'.

'Este', advirtió, 'no es un partido de privilegios, sino de trabajo. No es un partido de figurines ni de figurones ni de iluminados. Somos un partido de equipos, de gente que quiere que Andalucía y España sean cada vez más prósperas, más libres, más solidarias y más activamente partícipes de un proyecto común. [...] Este no es un partidito. El Partido Popular no es un chiringuito político para beneficiarse personal o colectivamente de nada'.

La presidenta y futura candidata a la presidencia de la Junta dijo que en el PP 'hay muy pocos puestos que disputarse porque estamos en la oposición. Por eso tiene más mérito que seamos hoy casi 120.000 militantes en Andalucía y que sigamos creciendo'. Frente a estas circunstancias, la política andaluza ha sido contaminada 'por la propaganda y por la excitación de los sentimientos más primarios' por quienes aún dividen a las personas 'entre los nuestros y los suyos'.