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Reportaje:

Una vida de película

Una productora valenciana realiza un emotivo documental sobre la vida del piloto Ricardo Tormo, fallecido en 1998

El anecdotario sobre Ricardo Tormo es tan amplio como jugoso. Y tan excitante como su vida, marcada por el éxito y el sufrimiento; y también por el coraje de un hombre que dejó una profunda huella en sus allegados. Tormo, bicampeón del mundo de motociclismo (en 1978 en 50 cc; y en 1981 en 125 cc) murió el 27 de diciembre de 1998 a los 46 años como consecuencia de una leucemia. Con motivo del 50 aniversario del nacimiento del piloto de Canals, la productora valenciana Nadie es Perfecto ha realizado un excelente documental que repasa la vida de una figura esencial del motociclismo español. Ricardo Tormo, la forja de un campeón se proyecta hoy, mañana y el viernes en la Fundación Bancaixa a partir de las 20.00. La recaudación obtenida irá destinada a la Asociación Valenciana de Lucha Contra la Leucemia (Asleuval).

La anécdota la cuenta el ex piloto italiano Loris Reggiani, uno de los protagonistas del documental, que dura 72 minutos: 'Durante una carrera del Mundial Tormo me dijo que le siguiera. Yo no le conocía de nada, pero sabía que su motocicleta era menos potente que la mía. También sabía que cuando llovía él era el mejor, el más técnico. Fuimos remotando posiciones hasta colocarnos entre los primeros. En un momento dado dejó de llover y la pista se secó. Entonces me dijo: 'Ahora vete tú'. Él era consciente de que con el piso seco tenía menos opciones' .

'El documental es más humano que deportivo, pero evidentemente no se puede soslayar su parte deportiva, que fue apasionante', explica Kiko Martínez, director y productor de Nadie es Perfecto, cuyo trabajo ha sido seleccionado por el Festival Internacional Documental de Barcelona (del 16 al 20 de octubre), que premia con 6.000 euros al ganador del concurso.

Ricardo Tormo, la forja de un campeón retrata a un luchador, un hombre competitivo a la vez que generoso. 'Ricardo siempre compitió en inferioridad de condiciones', cuenta Kiko Martínez; 'Él corría por libre contra marcas oficiales, con muchísimos más recursos y tecnología. En 1981 ganó el Mundial con un equipo formado por él; un fontanero, Salvador Carsí, y un mecánico, Ángel Carmona'. En efecto, Tormo se las ingeniaba para confundir a sus rivales: por ejemplo, tapaba su motocicleta con una manta para que sus rivales no la vieran, sabedor de que tenía menos potencia que el resto.

Cuando Tormo consiguió un patrocinador solvente, en 1984, sufrió un brutal accidente -chocó contra un automóvil en un polígono industrial- que le destrozó la pierna derecha, sometida hasta a 28 operaciones. Su pasión por el motociclismo era tan grande que nunca asumió que su carrera deportiva había terminado, por muy maltrecha que tuviera la pierna.

'No quisimos hacer un documental triste. La cinta está llena de anécdotas divertidas y graciosas, pero su emotividad es inevitable', afirma Martínez. El documental recoge testimonios de algunas de las personas que mejor conocieron a Tormo, entre ellos Salvador Gascón, presidente de la Federación Valenciana de Motociclismo; Carsí, Ángel Nieto, Aspar, Carmona, Reggiani... Todos tienen alguna historia que contar sobre una de las leyendas del motociclismo mundial.

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