La policía vasca desaloja por la fuerza las sedes de Batasuna
Los dirigentes del partido aberzale intentaron evitar la clausura de los locales
La operación de la policía vasca comenzó a las cuatro de la tarde en Vitoria. Los mayores enfrentamientos se produjeron en Bilbao, donde varios cargos públicos aberzales se encadenaron a un balcón y un manifestante tuvo que ser evacuado en una ambulancia. En San Sebastián se impidió que unos 400 simpatizantes de Batasuna llegaran hasta las sedes del PP y el PSOE. Se produjeron también dos heridos y tres personas fueron detenidas.
Los dirigentes de la formación radical dirigieron sus gritos contra el Gobierno vasco y el PNV. 'Nosotros hicimos saber al lehendakari de Vascongandas', afirmó el hasta ahora portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, en alusión a Juan José Ibarretxe, 'que no debería inmiscuirse en el ataque feroz que el Estado español planeaba contra Batasuna. Desgraciadamente, han hecho caso omiso de eso'. 'No esperábamos otra cosa de ellos, porque sólo entienden [el lenguaje] de la fuerza'.
Horas antes, la Guardia Civil y la policía habían clausurado ya media docena de sedes de Batasuna en Navarra. El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, explicó que la tardanza de la policía vasca en intervenir se debía a problemas 'operativos'. Ante la orden del juez Garzón, el Gobierno vasco pidió aclaraciones a la Audiencia Nacional y el propio magistrado, en la noche del lunes, envió un segundo auto indicando que se procediera al desalojo de las personas que impidieran el cierre. La policía vasca desactivó en la madrugada de ayer un artefacto con 10 kilos de explosivos junto a los juzgados de Tolosa.
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