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Las rieras de Montgat son las únicas peligrosas del Maresme sin cubrir

Cientos de vecinos se manifiestan contra el incumplimiento del plan de 1993

Lluís Pellicer

La alcaldesa de Montgat (Maresme), la socialista Rosa María Alemán, responsabilizó ayer al Gobierno de la Generalitat de haber permitido que sigan sin cubrir ni canalizar las tres rieras de esta localidad, cuando ya se ha solucionado el problema en todos los municipios litorales de esta comarca que sufren las consecuencias de las grandes avenidas de agua que bajan por las rieras desde la sierra del Corredor.

Unos 200 vecinos de Montgat se manifestaron ayer por la tarde a lo largo del tramo de la N-II que estos últimos días ha sufrido los efectos de las avenidas para pedir que se ejecute de inmediato el cubrimiento de estas rieras. Según la alcaldesa Alemán, la canalización de las rieras estaba incluida dentro de plan de rieras del Maresme, del año 1993, que se ha llevado a cabo prácticamente en su totalidad a excepción de en Montgat. Desde 1999, agregó la alcaldesa, hay una partida en los Presupuestos Generales del Estado destinada a este efecto, pero no se ejecuta. Alemán se lamentó de que la Generalitat no ha movido ni un dedo para reclamar que se inicien las obras.

Los vecinos de los barrios de Les Mallorquines y Monsolís de Montgat se sienten engañados, sobre todo, después de ver que se han ido canalizando las rieras más problemáticas del Maresme excepto las tres que hay en su municipio. También están hartos de tener que sacar el agua y el barro de sus viviendas cuando las rieras van llenas. Los agravios que sufren cada vez que se produce un aguacero en Montgat les llevó ayer a manifestarse por las calles de la población.

El pasado domingo por la mañana los vecinos de Monsolís, un antiguo barrio de pescadores, tuvieron que volver a limpiar los bajos de sus viviendas del lodo y el agua que arrastró la riera de Matas. Alguien se planteaba dejar el barrio, pocos se resignaban a lo sucedido y otros expresaban su voluntad de denunciar al Ministerio de Fomento.

'Antes de que interviniera Fomento, en la desembocadura de la riera había una canalización que llevaba el agua a la playa y evitaba las inundaciones. Hace 10 años decidieron sustituirlo por un paso subterráneo para peatones, y desde entonces cada vez que llueve nuestras casas se llenan de agua', explicaba ayer Fina Montalà, una vecina del barrio. Las críticas a las labores del ministerio no acaban aquí, porque los vecinos consideran que durante los últimos días, cuando se produjeron las inundaciones, su único objetivo era restablecer el tráfico en la Nacional II.

La carretera, prioritaria

La alcaldesa de Montgat fue la primera en denunciar esta actitud, en coincidencia con los vecinos, al día siguiente al aguacero al afirmar que 'las máquinas de Fomento retiraban el barro de la calzada y lo amontonaban en la calle de al lado'.

En el barrio de Les Mallorquines, la asociación de vecinos también reclama la canalización de la riera. El pasado fin de semana se produjo una nueva inundación cuando aún se trabajaba en la reparación de los desperfectos que ocasionó el primer temporal, el del día 1 de agosto, cuando se superaron los 240 litros por metro cuadrado. En pocos minutos un gran aguacero volvió a crear el caos. La bomba que succionaba las aguas residuales que se enviaban a los sistemas de depuración reventó y la riera de Sant Jordi bajó llena de aguas pluviales y residuales. 'Tuvimos la desgracia de sufrir unos 20 minutos excesivamente intensos y decidimos empezar retirando los árboles y los postes de la luz que cayeron', explicaba ayer el alcalde accidental de Montgat, Josep Manel Abad.

Los vecinos ven las tareas de reparación y limpieza como soluciones provisionales y ayer, durante la manifestación, también exigían al Ayuntamiento que presione ante la Generalitat y el Ministerio de Fomento para que se canalice la riera. 'Hace poco instalaron unas tuberías para canalizar las aguas residuales que llevan la suciedad hasta la desembocadura, y estos días, al quedar completamente atascadas, hemos comprobado que es una solución momentánea', se lamentaba la presidenta de la asociación de vecinos de Les Mallorquines, Fina Verdera.

Los ciudadanos de Montgat también piden al consistorio que sitúe la cuestión de las rieras como prioritaria en su programa de gobierno y que se les informe de todas las medidas que se tomen al respecto. Por el momento, según afirman los representantes de las asociaciones, los vecinos se siguen sintiendo solos y abandonados. Ayer, durante la manifestación, se podían escuchar voces que reclamaban que Montgat 'también es parte del Maresme'.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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