Sánchez Romero denunciará a los que causaron 'daño a la empresa'

La empresa de supermercados Sánchez Romero anunció ayer en un comunicado que se dispone a iniciar las acciones legales oportunas que en los 'ámbitos penal, social y civil' le corresponden contra 'el o los responsables del daño causado a la empresa'.

Un portavoz de Sánchez Romero aseguró que 'la cadena actuará judicialmente contra las personas que considere responsables', en referencia a los autores de las anotaciones despectivas, ofensivas o xenófobas encontradas en 250 solicitudes de empleo dirigidas al supermercado. 'El caso está en manos de los abogados, que están investigando', dijo este portavoz. La compañía rehusó facilitar la identidad de las personas a las que se refiere en su comunicado como posibles autores de las anotaciones ofensivas. Tampoco quiso precisar si estas acciones podrían estar dirigidas contra el ex empleado de la compañía Gregorio G.

Este ex trabajador reconoció que había realizado las anotaciones a mano en algunos de los currículos de los aspirantes a un empleo en Sánchez Romero. En ellas se refería a los peticionarios de manera ofensiva por su raza, aspecto físico u origen social. Lo hizo 'obligado por la empresa', según aseguró su abogado Luis Fernando Luján de Frías. Algunas de las notas encontradas decían: 'Cubana y con bigote', 'No, por gitana y fea', o 'Extranjero. Da miedo. Parece un indio'.

'No nos sentimos aludidos'

El letrado Luis Fernando Luján afirmó ayer que su cliente, Gergorio G., 'no se siente aludido' por el comunicado de la empresa Sánchez Romero, ya que el ex empleado de la compañía 'no ha causado ningún daño a la empresa'. 'Ya hemos dicho que mi cliente efectuó su trabajo siguiendo las directrices de sus superiores. Es lógico que la empresa depure responsabilidades', agregó Luján.

El abogado sostiene que su cliente decidió rescindir su contrato con la cadena de supermercados debido a la presión que los responsables de la empresa ejercían sobre él para que pusiera 'comentarios despectivos según las características de los aspirantes'. Por su parte, la cadena Sánchez Romero negó ayer 'rotundamente' haber 'abandonado en la vía pública documentación alguna de la empresa y de las personas que han presentado una solicitud de empleo en la misma'. La empresa reiteró en el comunicado enviado a los medios de comunicación que, 'desde su creación en 1954, siempre ha utilizado criterios de selección transparente, acordes con la legalidad vigente y totalmente ajenos a cualquier práctica discriminatoria'.

El director de la Agencia de Protección de Datos, Juan Manuel Fernández López, señaló que 'en el supuesto de que partes de un fichero circulen por ahí podría ser una violación del deber de secreto'. Fernández López indicó también que la agencia se había dirigido a la cadena SER para requerirle los documentos que una de sus redactoras encontró en unas bolsas de basura.