Sabor a torero

Si es noticia que un hombre muerda a un perro, no debe serlo que la ganadería de Torrestrella, previamente anunciada, viera su corrida rechazada por falta de trapío. Sí es noticia que Rivera aproveche una res brava y consiga una faena de buena nota, con series que iban a más desde la quietud y eran rematadas airosamente. Lógicamente, siguiendo la teoría, no es noticia que matase a la de nueve ni que las dificultades del quinto, con un punteo constante dictado por la falta de fuerza, no cupieran en su muleta; voluntad y aburrimiento, con cierta nota de humor negro cuando toro y torero se desplantaron mutuamente, ambos rodilla en tierra, lo que pudo ser la foto del día.

Sí es para contar que, bajo la piel del primero, no mal presentado, latiese un corazón cobardica de vaca lechera; Esplá sonrió, que es su manera de mostrar los nervios, aguantó, demostró que no podía ser y mató mal. Es habitual que banderillee con suficiencia y lo es menos que se faje con la muleta y entable un combate más técnico que brillante que evidencie un alto grado de maestría y de rancio sabor torero. Los detalles de Rafael de Julia, aislados, no son noticia ni saben a nada.